Ahora que la sociedad mexicana se dice sorprendida al revelarse que hay quesos que no son quesos, en Europa desde hace un tiempo han prohibido utilizar términos alimenticios lácteos para referirse a productos hechos con base en vegetales, esto para no engañar a los consumidores.
Por ejemplo, ya no se pueden comercializar productos etiquetados con el nombre de “leche de soya” pues técnicamente no se trata de leche ni la soya produce tal líquido.
Me enteré que existe la palabra mucílago, referida a una sustancia viscosa de las plantas a veces confundida con goma o fibra. En el caso de las semillas de chía, en el Laboratorio de Control de Calidad de Alimentos de la BUAP se encontró que el mucílago obtenido a partir de estas puede formar una película o lámina comestible para fabricar recubrimientos y conservar alimentos como frutas, embutidos y quesos.
Cuando se habla del desierto del Sahara uno imagina un gran horizonte de dunas amarillentas. Sin embargo, gracias a las últimas imágenes en alta resolución que pueden obtener los satélites, se ha descubierto que al menos en una considerable extensión de su zona occidental, que comprende países como Argelia, Mauritania, Senegal o Malí, existen al menos unos 1,800 millones de árboles y arbustos. Está lejos de ser un frondoso bosque por supuesto, pero son de vital importancia para el ecosistema que ayudan a conformar.