El sábado 8 de agosto cayeron fuertes lluvias en la sierra Norte, en la zona de San Felipe Tepatlán y Tlapacoya. Los arroyos crecieron bloqueando caminos y destruyendo puentes y una casa. A más de una semana, las vías de acceso a San Felipe Tepatlán siguen bloqueadas, dificultando el transporte de víveres y productos de primera necesidad.

En entrevista para LADO B, el Consejo Regional Totonaco dijo que nunca había llovido tan fuerte y tampoco habían tenido afectaciones tan severas, ni siquiera durante el desastre de 1999 –también provocado por las lluvias–. “En esta ocasión hubo más deslaves”.

A nivel municipal, el Consejo contabilizó 82 deslaves solamente en carreteras, sin contar todas las afectaciones que tuvieron los terrenos de cultivo y potreros, pues los terrenos en San Felipe Tepatlán tienen muchas laderas y son muy inestables. Igualmente se destruyeron las tuberías de agua potable, que tuvieron que ser reparadas por la propia comunidad. 

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Cerca de 200 metros de carretera se destruyeron después de la lluvia. En uno de los arroyos los habitantes tuvieron que talar un árbol para ponerlo como puente y así habilitar el cruce del río. El puente que comunicaba a San Felipe con La Guadalupana desapareció, quedando incomunicadas las comunidades de San Felipe, la Guadalupana, Xochimilco, Rancho y Xochicugutla; ningún vehículo pesado puede cruzar.

Los habitantes se organizaron para limpiar las viviendas y caminos, sin embargo, todavía falta mucho trabajo, sobre todo para restablecer las vías de comunicación.

En la última información oficial que tuvieron del municipio se comentaba un periodo de dos meses para reconstruir el puente, pero mientras tanto muchas personas siguen incomunicadas.

Foto: Marlene Martínez

El Consejo Regional Totonaco explica que un problema a partir del desastre por las lluvias es el alza de precios, por la escasez de víveres, por lo que hacen un llamado a las autoridades para que vigilen los precios de la canasta básica y de la leche Diconsa, para evitar el acaparamiento y los abusos.

Asimismo, en San Felipe Tepatlán, los habitantes están luchando contra el proyecto hidroeléctrico Puebla 1, y una de sus principales preocupaciones es la inestabilidad de los terrenos donde las empresas planean la construcción de la hidroeléctrica. 

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“Hay mucho peligro que las tierras se deslaven, ese es el temor de que se construya una hidroeléctrica, no es viable, esa es la preocupación de todos los habitantes que vivimos cerca del río”.

Este domingo 16 de agosto el gobierno estatal publicó un boletín en el que se lee: “Actualmente, continúan los trabajos con maquinaria pesada en los deslaves que afectaron las carreteras: Tlatzohuiloya-Tlaola-Tlapacoya y la Amixtlán-San Felipe Tepatlán, que registraron bloqueos hacia las localidades de San Felipe Tepatlán, Hermenegildo Galeana y Amixtlán de la región de Zacatlán, así como a Tlaola, Tlapacoya y Jopala”. Sin embargo, en San Felipe siguen las labores de rehabilitación por parte de los habitantes, principalmente para la recuperación de caminos.

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Para mayor información acerca de cómo poder ayudar a estas comunidades, puedes contactar al Consejo Tiyat Tlali, que también da acompañamiento a los pueblos totonacos de la región.