Mely Arellano

@melyarel

La elección del próximo domingo podría ser definida por las y los jóvenes… siempre y cuando salgan a votar. En la última elección federal el grupo poblacional donde se presentó más abstención fue el de 20 a 29 años. Esto es: 7.7 millones de jóvenes de esa edad no fueron a las urnas.

En la elección del próximo domingo tendrán oportunidad de votar poco más 22 millones de personas en ese rango; en Puebla lo podrán hacer 1 millón 199 mil 671, equivalente al 26.6% de la lista nominal estatal. No hay ningún otro grupo que supere esa cifra.

Con ello en mente, cuando se acercaban las campañas dicidimos hacer una cobertura dirigida a ese sector cuya mayoría, evidentemente, poco se involucra o se interesa en la política. Buscamos entonces a Arturo Uriza, un joven periodista musical que tiene un programa en Radio Buap, Wild Brunch.

Uriza sabía poco o casi nada de política y políticos, pero eso no era importante. Si hubiéramos querido un entrevistador con esos conocimientos habríamos invitado al buen Martín Hernández, o a Magaly Herrera, por ejemplo.

Invitamos a Uriza porque queríamos que las entrevistas incluyeran las dudas genuinas de esa generación a la que, de acuerdo con la estadística, no le interesa votar. Por eso además de plantear preguntas sobre los temas en los que suele enfocarse LADO B, como género, diversidad sexual, transparencia y derechos humanos, Uriza lanzaba preguntas que ayudaran a perfilar al personaje en cuestión desde un punto de vista más social, cultural y humano.

Las entrevistas se realizaron a las candidatas y los candidatos al Ayuntamiento de la capital y al gobierno del estado. ¿Por qué? Porque no nos daba tiempo de hacer más; inicialmente queríamos incluir a las Cholulas pero ya no fue posible.

Las entrevistas las empezamos a grabar en marzo. De quienes aspiran a la presidencia municipal de Puebla sólo nos faltó la candidata de Nueva Alianza, Ernestina García, y de quienes buscan la gubernatura nos faltaron Martha Erika Alonso y Luis Miguel Barbosa. Más adelante les cuento por qué.

Con este ejercicio, que si bien no significó descubrir el hilo negro, sí obtuvimos resultados reveladores.

Por ejemplo nos dimos cuenta de que con preguntas más formales y periodísticas, la persona entrevistada asumía un tono y una expresión facial diferente -vean si no, la entrevista a Eduardo Rivera-, y que tienen una habilidad sorprendente para responder sin responder: Víctor Gabriel Chedraui y Enrique Doger son unos maestros en eso.

También notamos que las preguntas que parecían más relajadas podían ser las más difíciles de responder porque, supongo, no están acostumbrados a medir el impacto de cuestionamientos del tipo: “¿Haz hecho trampa?” o “¿El piropo es acoso?”.

Descubrimos además que la honestidad es un bien tan preciado y escaso en la política, que decir que gastaron 3 mil u 8 mil pesos en la ropa que traen puesta fue muy celebrado por la gente. Hubo quienes para evadir la pregunta dijeron que no se fijaban en eso, y no sé qué les llevó a pensar que esa respuesta era mejor porque, ¿quién puede ir a comprarse ropa sin fijarse en el costo, cuando en Puebla la mitad de la lista nominal vive en situación de pobreza?

A ello se suma su ignorancia sobre el costo del pasaje -y eso que preguntamos por el RUTA que es el más conocido y nuevo-, el monto del salario mínimo y lo (poco) que se puede comprar con ese dinero. Vaya, ni siquiera Michel Chaín -quien por cierto, antes de iniciar la entrevista se quitó su iWatch-, ex secretario de Trabajo y Competitividad lo supo: dijo que anda en $200 cuando apenas roza los $89.

Las candidatas y los candidatos también nos transmitieron cosas sin decirlas, como el tiempo que en algunos casos nos hicieron esperar -poco más de una hora-, la cara que ponían cuando Uriza -pelo largo, piercing en la nariz y tatuajes en los brazos- les decía que él era el entrevistador o el hecho de hubo quien nunca nos dieron la entrevista.

A Ernestina García -quien recientemente declinó a favor de Eduardo Rivera- la busqué a través del presidente del Partido Nueva Alianza, Emilio Salgado, quien primero dijo que sí pero luego ya nunca contestó.

A Martha Erika Alonso y Luis Miguel Barbosa los busqué desde el 6 de abril, cuando aún ni siquiera iniciaban las campañas, a través de sus respectivas encargadas de prensa, Sandra Izcoa y Verónica Vélez. Ninguna dijo que no pero, como a la negra, tampoco me dijeron cuándo. Con Sandra Izcoa intercambié 16 mensajes y de plano dejó de contestarme después del 1 de mayo y con Verónica fueron 26 mensajes que dejó de contestar después del 8 de mayo. 

Hicimos un último video donde Uriza lanza las preguntas que les habría hecho a ambos, para que quienes han seguido esta serie sepan de qué queríamos hablar con Martha Erika Alonso y Luis Miguel Barbosa, entre quienes se definirá la elección a la Gubernatura del estado.

También hicimos un análisis de las propuestas de las candidatas y los candidatos, donde pueden revisar cuántas están pensadas en ese sector joven de la población que, por desgracia para este país, no suele votar.