Héctor Jesús Cristino Lucas

Cuando un subgénero se arroja a un abandono absoluto, siempre es halagador encontrarse con alguien que intenta revivirlo.

El cine de caníbales, por ejemplo, fue un subgénero prácticamente abandonado en la década de los 70 que volvió a estar en boca de todos -nótese la ironía- gracias al modesto The Green Inferno (2013) de Eli Roth y al controvertido Bone Tomahawk (2015) de S. Craig Zahler. Pasa que a veces necesitas una sola película, o un par de ellas, para poner a andar un subgénero de nuevo.

Esto mismo está ocurriendo con el subgénero Rape and Revenge.  Ese subgénero transgresor que fue acusado por la crítica inglesa como “nauseabunda y desagradable”. Tenemos, por ejemplo, la película que le dio sentido a la palabra “polémico” en la historia del cine universal: The Last House on the Left de Wes Craven en 1972, y unos años después I Spit on Your Grave de Meir Zarchi en 1978.

¿Pero qué es exactamente este subgénero? Es la “exaltación de la mujer, de la ira y el coraje de la mujer”, o al menos, eso es lo que estos directores explicaron en su momento.

El Rape and Revenge es producto de una década violenta, satanizada y llena de conflictos bélicos. Por un lado la espantosa Guerra de Vietnam que impactó al mundo con su interminable cifra de muertos, y por el otro, a finales de los 60, la fuerte oleada de asesinatos propiciados por la infame Familia Manson.  

El Rape and Revenge, como supuesto subgénero transgresor y polémico dentro del Horror, pretendía responder a una década de azotadora violencia con la misma cucharada, sin tapujos, aunque usando “metáforas”.

El uso de la figura femenina -anticuado para algunos, erróneamente romántico para otros- no era más que una representación del ideal de una sociedad que sería interrumpida y masacrada por la intervención de otra figura metafórica -la masculina- por medio de -otra metáfora- la violación.

Sin embargo, tanto The Last House on the Left (bandera de este subgénero) como I Spit on Your Grave, fueron incomprendidas en su momento. Nadie daba credibilidad al tema de los simbolismos y era comprensible. Actualmente existe una que otra película que intentó emular la fórmula pero sin éxito.

Las películas Rape and Revenge más destacadas del siglo XXI son dos, y una de ellas ya tuvo su propia crítica en esta misma sección: Savaged de Michael S. Ojeda estrenada en 2013.

Y la otra es la película francesa y debut de la cineasta Coralie Fargeat: Revenge de 2017.

Cuando Revenge se estrenó, prácticamente fue alabada por la crítica especializada. De hecho, el sitio web por excelencia en el género de horror, Bloody Disgusting, alabó la propuesta de Coralie Fargeat y la calificó como  una de las poquísimas cintas Rape and Revenge más contestatarias que se hayan hecho.

Prácticamente el debut de Fargeat retoma los elementos esenciales del subgénero: la crítica, el simbolismo, la violencia, y por supuesto, la violación y la venganza, hasta llevarlo a un punto casi poético y único.

Si analizamos el argumento de esta película, poco o nada estaríamos descubriendo. No hay innovación en cuanto temática, sin embargo lo que yace entre líneas es lo mejor de lo mejor de los últimos tiempos en el subgénero.

Coralie Fargeat se toma su tiempo para arrancar la odisea y nos coloca en un escenario simple y monótono: La aventura de un atractivo joven millonario con su amante, una joven y atractiva lolita que su único objetivo es pasarla bien. Aquí, el simbolismo de la mujer no está volcado en su belleza cliché, sino en su transformación.

Los personajes femeninos de este subgénero, usualmente, poseen una personalidad distinta antes de que los personajes masculinos cometan el acto de la violación. Sin embargo, pocas veces vemos una transformación tan evidente y abismal como en Revenge.

En Revenge, tratamos con una transformación de carácter, personalidad y “percepción de vida”. La chica que al principio es una dama de compañía tendrá un cambio radical -en el que se incluye el físico- para cometer la tan ansiada venganza.

Además, los recursos usados por Coralie Fargeat crean toda una experiencia. Usa el ambiente desértico para embellecer las escenas y hasta nos recuerdan filmes como Mad Max de George Miller.

Podríamos describir Revenge como un film que retoma los clásicos Rape and Revenge de los años 70 para embellecerlos de manera poética y hasta surrealista.

Revenge es una joya extravagante que puede presumir de ser una auténtica joya de culto, especialmente para los entendidos del subgénero, pero también para los que disfrutan de lo transgresor.

Sinopsis: “Tres hombres casados ricos se reúnen anualmente para irse de caza. Pero esta vez, uno de ellos viene acompañado de su amante, una joven que despierta rápidamente el interés de los otros dos. Las cosas se complican dramáticamente para ella… dejada por muerta en medio de la nada, la chica vuelve a la vida, y el juego de caza se convierte en una venganza implacable.”

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**Las ideas aquí expresadas son responsabilidad de su autor y no reflejan los puntos de vista de LADO B**