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Lado B

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El viernes 27 de abril se llevó a cabo el Concurso de Debate del Nivel Medio Superior, organizado por la facultad de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad Iberoamericana Puebla.

Este año la Ibero recibió a 14 escuelas de nivel medio superior para debatir temas sociales de pertinencia actual como La Ley de Seguridad Interior, la privatización del agua, minería en zonas protegidas o las reformas energéticas.

La mestra Mar Estrada, una de las académicas organizadoras del evento y jurado del mismo, resaltó la importancia de los concursos de debate para enseñar a las y los estudiantes a investigar con profundidad sobre temas de relevancia nacional, para que aprendan a argumentar de manera sustentada y, en general, defender una posición con base en el conocimiento.

Con un equipo por escuela se hicieron dos rondas iniciales, en las que todos los equipos participaron y los cuatro equipos con los puntajes más altos pasaron a la semifinal. Las primeras dos rondas fueron de 40 minutos cada una y la semifinal y final fueron de una hora.

Los jurados del concurso fueron académicos expertos en economía, relaciones internacionales, derecho, finanzas y de humanidades.

En la Ibero suelen hacer dos debates al año, uno para el nivel medio superior y otro para nivel licenciatura. A comparación del concurso de preparatorias, el concurso a nivel superior es solamente entre alumnos de la Ibero, sin embargo, están planeando abrir la invitación a otras universidades.  El concurso entre estudiantes universitarios se realizará en octubre de este año.

En el concurso de la semana pasada, las escuelas que lograron el puntaje para  pasar a las rondas de semifinales fueron el Colegio América de Puebla y el Instituto Fray Pedro de Gante de Apizaco, Tlaxcala, y la Escuela María Luisa Pacheco, de Puebla, mientras que la final se disputó entre alumnos del Colegio América de Puebla y la Prepa Ibero de Tlaxcala.

La experiencia del equipo Ibero

El equipo de la Prepa Ibero campus Puebla se quedó a nueve puntos de pasar a las semifinales.

Los participantes explican que los puntos se otorgan de acuerdo con variables como: réplicas, contrarréplicas, alegato de apertura, clausura, postura, modulación de voz, conocimiento sobre el tema, entre otras.

Carlos Goel Rodríguez, quien ya había participado antes en otros debates en formatos diferentes, considera que este tenía un ritmo más rápido y tenían que controlar la velocidad con la que decían todo, para que no se les agotara el tiempo antes que terminaran el argumento o de lo contrario les restaban puntos. Eran intervenciones de tres minutos.

Algo que considera que pudo quitarles puntos era la detección de falacias, es decir, evidenciar cuando el equipo contrario basaba sus argumentos en creencias, sin embargo, su estrategia consistía en la sustentación de los suyos con datos duros y entonces ya no les quedaba tiempo para resaltar la falacia en los otros.

Los temas y las posturas se sortean al azar para cada equipo. En su caso, tuvieron que abordar el tema de si se debería detener la migración de mexicanos hacia Estados Unidos desde México o no, y si era o no conveniente la privatización del agua. En ambos casos, tuvieron que defender las posturas en contra.

Carlos quiere estudiar Ciencias Políticas y Administración Pública para involucrarse en la política, sin embargo solía ser muy tímido y callado, por eso comenzó a participar en concursos de debate, para fluir y comunicarse mejor.

Por su parte, Mario Augusto Tlapale Almodóvar, otro integrante del equipo, quiere estudiar Derecho, por lo que los concursos de debate lo preparan para su carrera como abogado litigante.

Daniela Sanchez Asomoza, tercer integrante del equipo, considera que las personas de su edad no suelen explicar los temas sociales del momento, al contrario de los adultos que no sólo saben sino que pueden analizarlos.

A Daniela le interesa estar informada sobre esos temas pues quiere estudiar Relaciones Internacionales y enfocarse en temas de Derechos Humanos.