Héctor Jesús Cristino Lucas

El teatro y su doble (1938) es uno de los ensayos más reconocidos del dramaturgo, ensayista y novelista francés Antoine Marie Joseph Artaud -comúnmente llamado Antonin Artaud- donde expone y consagra a manera de manifiesto el denominado Teatro de la crueldad.

Desde su aparición a finales de los años 30, el Teatro de la Crueldad se volvió un movimiento bastante heterogéneo, tenía como propósito impactar al público mediante situaciones inesperadas y sorprendentes. La regla básica que los dramaturgos obedecían era el de dejar una huella imborrable en el espectador al tocar las fibras más íntimas con un espectáculo escénico casi ritualista y hasta extremo.

Por supuesto que el Teatro de la crueldad no se basó, como suele creerse, en actos violentos o abominables para sorprender al público. De hecho, el término crueldad tuvo varias connotaciones, algunas más filosóficas y profundas que otras, llevadas a escena.

Werner “Akizur” Ruzcika, actor y cuenta cuentos digital, lo explica muy bien en el siguiente video:

Sin embargo la tendencia, ahora sí, violenta y sádica en el amplio sentido de la palabra que se desprendió del Teatro de la crueldad, fue el movimiento In-yer-face (En tu cara) cuyo propósito era atacar los sentimientos primarios del espectador generando un choque emocional y hasta “traumático” que quedara para toda la vida.

Este tipo de obras extremas han sido polémicas y sumamente criticadas, alegando que se ha malinterpretado y hasta desvirtuado el verdadero propósito de Antoin Artaud en su famoso manifiesto, supliendo lo sutil y hasta simbólico de la crueldad, por lo evidente y explícito del término.

Este movimiento teatral se preserva pese a la crítica y se ha hecho de importantes exponentes como Peter Weiss o Fernando Arrabal, pero es el dramaturgo anglo irlandés Martin McDonagh el más conocido de ellos y nuestra cita de hoy.

McDonagh es reconocido principalmente por sus obras de violencia extrema In-yer-face, entre las que destacan su ópera prima de 1996 The Beauty Queen of Leenane (La reina de belleza de Leenane) y que le valió el premio del Círculo de la crítica Teatral Británica.

La historia nos centra en un pequeño pueblo de la costa de Irlanda, donde Maureen, una mujer soltera de 40 años es obligada a atender a su tiránica madre, Mag, de 70. La obra, que se ha descrito como un “enfermizo relato de madre e hija” ha sido puesta en escena innumerables veces.

Su ópera prima ha recorrido el mundo en distintos idiomas, versiones y nacionalidades por cada dramaturgo que se atreve a llevarla a escena. Una obra estremecedora que vale mucho la pena mirar por lo menos una vez en la vida ya que cumple con lo que promete: quedarse en la mente.

Sin embargo, su obra más famosa es la polémica y brutal The Pillowman (El hombre almohada) presentada por primera vez en el Royal National Theatre allá por el 2003. La historia cuenta cómo un reconocido escritor es detenido por la policía luego de que sus cuentos fueran relacionados con una serie de brutales asesinatos.

Por otro lado, la opera prima en el cine de McDonagh fue In Bruges, que por cierto no sólo inauguró el Festival de Sundance 2008 con excelentes resultados, sino que también, el propio Martin McDonagh ganó el premio a Mejor Guión Original en los Premios BAFTA y desde entonces McDonagh es considerado un cineasta prometedor.

Pero nadie negará que ninguna de sus anteriores obras o films ha expuesto de manera tan profunda, perversa y malsana el verdadero significado del In-yer-face como su última producción Three Billboards Outside Ebbing, Missouri

Three Billboards Outside Ebbing, Missouri fue escrita y dirigida por Martin McDonagh y es ese Teatro de la Crueldad desvirtuado hecho película, es el In-yer-face en su máximo esplendor llevado al séptimo arte.

Cualquiera que necesite un acercamiento minucioso al radical estilo de este tipo de obras polémicas, violentas e inesperadas, podría empezar con esta fantástica película ya nominada al Oscar de Martin McDonagh.

Algo a destacar es que Three Billboards Outside Ebbing, Missouri es una película que, curiosamente, ha sido catalogada como un drama de crimen, misterio y comedia. Así es, aunque suene difícil de creer, ésta película entra sin ningún problema en el género de la comedia. Esa es la grandeza de su guión. Pese a tener unos momentos increíbles de comedia negra inquietante, no deja que la historia pierda su seriedad.

Otros cineastas que han hecho este tipo de experimentos, y que todo parece indicar que McDonagh les rinde un importante tributo con su película, son sin duda los Hermano Cohen.

Three Billboards Outside Ebbing, Missouri es, hasta cierto punto, una magnífica sucesora de aquella Fargo de 1996 que dirijo Joel Cohen en solitario. Recordemos que esta cinta fue una de las favoritas en la década de los 90 y que también obtuvo importantes nominaciones al Oscar, incluyendo la de mejor película, aunque sólo ganó el premio a mejor actriz y mejor guión original.

Ligar la cinta de McDonagh con Fargo no es descabellado, ya que la ganadora a mejor actriz fue nada menos que Frances McDormand, quien es, curiosamente, la misma protagonista de la película de Martin McDonagh.

Three Billboards Outside Ebbing, Missouri es un espectáculo alucinante del que si no alabamos hasta del más mínimo detalle estaríamos cometiendo una grave injusticia.

El guión, a través de sus innumerables vueltas de tuerca es una joya exquisita. De una premisa básica, McDonagh es capaz de introducirnos a cientos de sub tramas que no sólo son excelentes en su desarrollo, sino que también las hace crecer hasta que el misterio, el drama y la tensión llegan a un punto de inflexión totalmente irreversible. A la par que genera debates y reflexiones acerca de la ética en casos tan impactantes como los feminicidios, y sobre el poder de la publicidad.

No podemos dejar pasar la dirección. ¡Dios mío! Existe un plano secuencia, de esos que te hacen recordar a las tomas de Brian De Palma en sus años de oro que estoy seguro quedará para la historia. De lejos, la mejor escena de toda la película, créanme.

Muchas de las escenas que se han hecho aquí, de manera explícita, obedecen al famoso estilo teatral In-yer-face, ya que pese a ser catalogada como una comedia negra, la película tiene unos momentos de violencia y horror tan impactantes como únicos.

Pero lo mejor, y creo que en esto estaremos de acuerdo la mayoría, son las actuaciones y el perfecto desarrollo de cada personaje en la historia. Woody Harrelson tiene uno de los mejores papeles desde el Natural Born Killer de Oliver Stone.

¡Dios mío con Frances McDormand! Esta película trata de justicia. ¿Quieren hablar de justicia? Denle el Oscar y punto. Sin embargo, no voy a mentirles, el mejor personaje de todo el film es el que interpreta Sam Rockell, con él es que se puede dar una clase completa de cómo se debe desarrollar a un personaje a través de un muy buen guión.

Esta es una película más que completa. Una de las mejores de los últimos años y no sólo dentro del thriller, el drama o la comedia negra, sino de todo el cine en general. Sin duda se ha vuelto ya un clásico instantáneo, de esos que deben verse por lo menos una vez antes de morir. En la misma tradición de Fargo, Three Billboards Outside Ebbing, Missouri deja de ser una película para volverse un puñetazo en la nariz.

Sinopsis:

“Mildred Hayes (Frances McDormand), una mujer de 50 años cuya hija ha sido violada y asesinada, decide iniciar por su cuenta una guerra contra la policía de su pueblo al considerar que no hacen lo suficiente para resolver el caso y hacer justicia.”