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Aranzazú Ayala Martínez

@aranhera

El Doctor César trabaja en el futuro. Con lápiz y papel, él y su equipo diseñan y comprueban cálculos que se podrán usar en una computadora cuántica.

En un tiempo no tan lejano, estos equipos dejarán de ser prototipos que ocupen cuartos enteros y cuesten millones de dólares, y se vuelvan parte de la cotidianidad de la computación al alcance de las personas.

César Bautista Ramos, de la Facultad de Ciencias de la Computación de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), se especializa en teoría de la computación y computación cuántica.

Aunque el nombre de su área de investigación suena a un concepto sacado de un libro de la ciencia ficción, es una rama de las ciencias de la computación que tiene una parte abstracta pero también experimentos aterrizados a la mejora y creación de nuevas máquinas que tengan funciones más rápidas y precisas.

Bautista explica que las computadoras que conocemos utilizan las reglas de la física macroscópica, lo que el ser humano ve. Pero desde la década de los 80 a alguien se le ocurrió hacer cómputo utilizando la física y las leyes de las partículas elementales, que son las que componen los elementos.

Hoy existen pocas computadoras cuánticas; una de ellas, ensamblada por una empresa canadiense, fue comprada por Google y costó 14 millones de dólares.

El Doctor Bautista muestra una foto donde aparece una suerte de enorme caja negra, que es un cuarto donde está la computadora y a donde deben entrar sus operadores, para evitar interferencias en el funcionamiento de las partículas.

Estos equipos tienen una capacidad de procesamiento y almacenamiento exponencial, y también pueden resolver ecuaciones en un tiempo mucho menor.

Los prototipos de computadoras cuánticas, basadas en las leyes de las partículas invisibles a nuestros ojos, son utilizadas también para la criptografía y el descifrar mensajes de una forma más eficiente y precisa.

A lo que César se ha dedicado es a extender las capacidades para resolver mucho más rápido –de manera exponencial, dice– sistemas de ecuaciones. Así, con todo un trabajo hecho a mano, se ha logrado diseñar algoritmos y cálculos que podrán también ser utilizados en computadoras cuánticas.

Desde el 2005, poco más de una década de trabajo con otros investigadores de la BUAP, César Bautista ha publicado tres artículos en publicaciones internacionales, poniendo un pie sólido en el mundo de la computación del futuro.

Aparte de la computación cuántica, César también trabaja en la combinatoria. Esto, explicado en palabras para mortales, sirve para contar cosas y calcular combinaciones. César pone como ejemplo la distribución de tiendas Oxxo: la combinatoria se utiliza para saber dónde poner los Oxxos sin que compitan el uno con el otro.

Entre matemáticas y software, el Doctor César hace cálculos desde su oficina de paredes de cristal, en el tercer piso de la facultad. Pese a estar de lleno en el mundo de las computadoras, repite que ahí las cuentas se hacen con lápiz y papel.