Aquila.-Por un momento parecía que Doña Emilia miraba al cielo pidiendo por el alma de su hijo, hasta que sus ojos se fueron de paso y se pusieron blancos, las fuerzas flaquearon y su cuerpo cayó sobre los brazos de su familia.

El hijo mayor de Doña Emilia García Cabrera la tomó por las axilas y la arrastró unos pasos hasta un tronco que está al pie de la tumba de Hidilberto Reyes García, el niño de 12 años que murió abatido por un disparo del Ejército Mexicano.

En pleno panteón del Duin en el municipio costero de Aquila, en Michoacán, la familia de Doña Emilia sacó agua y alcohol para reanimarla, le empaparon la cabeza y comenzaron a darle palmaditas en la frente hasta que reaccionó a los estímulos, otra vez se había desmayado con el recuerdo de su hijo.

En los últimos dos años, la mujer de 72 años perdió varios kilos, por primera vez en su vida le salieron canas, siente parálisis en el lado derecho de su cuerpo y un tic nervioso persigue su ojo izquierdo a donde quiera que mire, el dolor la ha envejecido.

Cuando despertó de su trance […]

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