Héctor de Jesús Cristino Lucas

[dropcap]¿A[/dropcap]sesinos en el género de horror? ¡Los hay de a montones! Con distintas motivaciones y turbios pasados que los han vuelto indudablemente máquinas de matar. Existen los metódicos, planeando en sus recónditas guaridas malévolos planes contra sus víctimas, como John Doe en Seven o Hannibal Lecter en The Silence of The Lambs. Otros, en cambio, empuñan armas con el único fin de acabar con el primero que se topen, véase a Jason Voorhees en la franquicia Friday the 13th o Victor Crowley en la trilogía de Hatchet. Sin embargo, existe uno al que el cine muy poco ha recurrido, y por ende, muy pocos tops especializados se han hecho al respecto: el asesino travesti.

Los asesinos del género de horror usan máscaras o atuendos atemorizantes que fungen como sellos, ya sea en sus modus operandi a la hora de asesinar, o bien, como simple estilo que les distingan del resto: máscaras de hockey, garras metálicas o piel humana sobre el rostro. El interesante juego de la no-identidad, porque al desconocer quién está detrás de la máscara evidentemente la situación se vuelve más aterradora. Sin embargo, estos antagonistas, usan atuendos femeninos por diversas razones. Ya sean traumas del pasado, o las usan para ocultarse, o bien, representan un lado reprimido que sale a flote a la hora de matar.

De más está decir que habrá spoilers (¡ojo!), y aunque no todos en la lista sean asesinos específicamente, vaya que sus papeles como travestis han sido emblemáticos en el género de terror. Prepárate pues para este nuevo top del Cinemaniaco que explorará uno a uno la psique de estos personajes que si bien en su mayoría son ficcionales, algunos, están basados en asesinos que realmente existieron.

Estos son, los 7 personajes travestis más emblemáticos del género de horror

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7.- Dr. Frank-N-Furter – The Rocky Horror Picture Show (1979)

¿Y por qué no abrir con un clásico de clásicos? Uno de los mayores referentes en cuanto a musicales se refiere, y uno de los mejores filmes serie B -al lado quizás de Plan 9 from Outer Space–  que son ahora irremediablemente de culto. The Rocky Horror Picture Show pasó sin pena ni gloria en la década de los 80s, pero hoy en día es todo un emblema no sólo para el terror sino también para el cine universal, además de haber ofrecido las primeras actuaciones de Susan Sarandon y Tim Curry en la pantalla grande. Y oh sí, Tim Curry es quien se queda con el puesto inaugural.

Gracias a este papel Ridley Scott lo buscó para encarnar al antagonista en su fantástica Legend, encarnando al demoniaco Lord of the Darkness, y Tommy Lee Wallace lo elevó a las nubes cuando le otorgó el papel de Pennywise en la miniserie de los 90s It. Sin embargo, el Dr. Frank-N-Furter, un alienígena del planeta Transexual, es el mejor papel de Curry en toda su carrera. Excéntrico, divertido y peligrosamente lujurioso, el tiempo le otorgó el título de ser uno de los travestis más icónicos del séptimo arte.

6.-  Lora Lee Sherman – Cherry Falls (2000)

Probablemente este personaje sea el menos conocido, y por supuesto, el menos emblemático del top, sin embargo, es uno de los más recordados para los fanáticos del horror. La película nació como un producto más del subgénero Slasher allá por los 90s, ese mismo que intentó revivir la franquicia de Scream, por ello es que no es tan aclamada ya que muchos de estos filmes de la ola post-scream no fueron muy bien recibidos. He ahí Urban Legend o Valentine de Jamie Blanks. Y aunque Cherry Falls no destaque por su historia, vaya que su personaje antagónico es uno de los más interesantes.

Gran parte de ésta historia, como bien distingue el slasher de todos los demás subgéneros en el horror, gira en torno al tema de la venganza. Fantasmas del pasado que vuelven para desenterrar un antiguo secreto. Nuestra antagonista, Lora Lee Sherman, es aterradora. Sólo imagínate que lo último que veas antes morir sea el sonido de unas botas corriendo hacia ti…

5.- Angela Baker – Sleepaway Camp (1983)

Esta es una joya indiscutible en el cine de terror. Al igual que Cherry Falls, sólo que en los ochentas, fue un subproducto nacido por el inmenso furor de los Slashers de la década. Por ello tenemos el cliché de los campamentos de verano y un asesino en medio de todo. De hecho, si no fuera por un par de muertes ingeniosas y, cómo no mencionarlo, su inesperado final inspirado en cierta película de Hitchcock de la que hablaremos después, Sleepaway Camp sería ahora una película más del montón. De hecho, el asesino de éste film es uno de los más aterradores y emblemáticos justamente por eso.

La actriz Felissa Rose quedó inmortalizada de por vida al interpretar a Angela Baker, una niña común y corriente que es mandada a un campamento de verano por su extraña tía. Pronto, diversos asesinatos comienzan a sembrar el miedo y la búsqueda del asesino, el extraño y traumatizante asesino, convirtieron a Sleepaway Camp en uno de los filmes de horror más extraños e hilarantes de todos los tiempos.

https://www.youtube.com/watch?v=K6z6QIiXTnY

4.- Doctor Robert Elliott – Dressed to Kill (1980)

En la década de los 90s es donde se registran con mayor fuerza todos esos thrillers psycho-eróticos repletos de intriga y seducción. En el 92 Paul Verhoeven nos trajo el emblemático cruce de pierna de Sharon Stone en Basic Instinct, y Adrian Lyne puso a Glenn Close y Michael Douglas en lo más alto con su fantástica Fatal Attraction. Sin embargo, una década atrás, hubo un film que definió las reglas de todas estas películas. Dirigida por el grandioso Brian De Palma Dressed to Kill es un emblema del género del terror psicológico de inicio de los 80s.

Probablemente Hitchcock tuvo mucho que ver -al igual que los Giallos de Dario Argento- en la manufactura de este asesino travesti: todo en su psique y forma de matar, ya que el Doctor Robert Elliot -interpretado por Michael Caine- posee una doble personalidad que cambia constantemente para saciar su lado asesino. ¿Y cómo lo logra? Pues sí, travistiéndose.

3.- Divine – Pink Flamingos (1972)

El nombre artístico de Divine corresponde al actor y cantante estadounidense Harris Glenn Milstead, un travesti que quedó inmortalizado luego de protagonizar las polémicas y transgresores películas de John Waters. La principal de ellas, y por lo cual ahora es considerada todo un emblema del cine underground, fue Pink Flamingos. Grotesca, desinhibida y escatológica. Dentro del universo Waters, éste actor siempre fue considerado una mujer. Una mujer excéntrica que haría lo que fuera por conseguir cualquiera de sus más obscuros propósitos… aún si de comer heces de perro se refiere.

Ésta película ha sido considerada altamente ofensiva, y es una de las más censura, y por ello mismo, todo un referente en el séptimo arte. No sólo es de horror, sino que en sus entrañas habita un potente halo de comedia negra que sólo los más entendidos en el género de terror sabrán apreciar. Un clásico de culto inmediato donde quedó inmortalizada Divine. Ese personaje que en Pink Flamingos fue malévolo, gracioso y francamente asqueroso.

https://www.youtube.com/watch?v=0g09RQfWEY4

2.- Buffalo Bill – The Silence of The Lambs (1991)

Por los Slasher desgastados de los noventas es que corre el rumor de que no existió ni una buena película de terror en aquella década. Mal, mal, mal. The Silence of The Lambs no sólo es un excelente film de terror policial, sino que es la única dentro de éste género -al menos hasta ahora- en conseguir un Oscar a Mejor Película en 1992. Y estarán de acuerdo conmigo, pero en un top de personajes travestis donde no se menciona al personaje Jame “Buffalo Bill” Gumb, sin duda alguna, no es un top completo. Este personaje es uno de los asesinos, además, más mencionados en todo el séptimo arte.

Interpretado por el actor estadounidense Ted Levine, este personaje -previamente adaptado de la novela homónima de Thomas Harris- está basado en el infame asesino Ed Gein, que de hecho, ha sido la inspiración de cientos de escritores y directores en la Historia. Y la escena más emblemática, ya lo saben, es el mítico baile con la canción de Q Lazzarus Goodbye Horses. ¿Acaso se puede pedir más?

https://www.youtube.com/watch?v=vqfY6KyEHvU

1.- Norman Bates – Psycho (1960)

Edward Theodore Gein, mejor conocido como Ed Gein o “El carnicero de Wisconsin”, fue un infame asesino descubierto allá por la década de los años 50s. Autor de los homicidios de Mary Hogan y Bernice Worden -razón por la cual no puede considerado asesino en serie, ya que para serlo las víctimas deben ser mayores a tres- y de haber profanado las tumbas de varias mujeres en un cementerio de Wisconsin, la noticia impactó tanto a los Estados Unidos que inmediatamente el caso inspiró a innumerables escritores y cineastas que dieron rienda suelta a su imaginación para crear míticas historias.

Tanto Buffalo Bill de la novela de Thomas Harris como el perturbador Leatherface de la franquicia The Texas Chainsaw Massacre, fueron inspirados por este terrible personaje histórico. De hecho, el escritor Bret Easton Ellis manufacturó a su demente Patrick Bateman de American Psycho con las mismas filias que Gein. Así pues, Norman Bates del libro de Robert Bloch, Psycho, posteriormente adaptado a cine por Alfred Hitchcock en 1960, no es la excepción. Éste personaje, como ya lo veníamos comentando en puestos anteriores, marcó todo un antes y un después en el género.

De hecho, hay quienes consideran que Psycho -junto a Peeping Tom– fueron quienes manufacturaron el subgénero Slasher. Y no cabe duda, todos los elementos usados tanto en Halloween como en Friday the 13th vienen de este clásico indiscutible. De hecho, Norman Bates vino a traer en el imaginario colectivo al asesino con disfraz, uno usado específicamente para cometer homicidio, de ahí las máscaras de Hockey o las sierras. Al día de hoy, un clásico indiscutible no sólo del género de terror sino del cine universal, que además de todo, rompió con varios cánones del séptimo arte.

A Hitchcock se le atribuye, por ejemplo, la cámara en primera persona, mostrando la visión del asesino y matar a la protagonista, por primera vez en la historia, a los 30 minutos de la película. ¿Y lo mejor? La manufactura psicológica del asesino -similar a lo que De Palma mostraría con Dressed to Kill en los 80s- con esta ruptura de personalidades y travestismo.