Lado B
Luis Ricardo, el dibujante que quiere ser cineasta
"Yo sé dibujar… bueno, como cualquiera que lo hace a diario. Yo hago dibujos y si fallo en eso soy profesor, y si fallo en ser profe, tengo planeada una película"
Por Ámbar Barrera @astrobruja_
04 de diciembre, 2016
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Tomada de facebook.com/ramosaparte/

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Ámbar Barrera

@Dra_Caos

–Yo sé dibujar… bueno, como cualquiera que lo hace a diario –dice Luis Ricardo-. Yo hago dibujos y si fallo en eso soy profesor, y si fallo en ser profe, tengo planeada una película… son trucos para mantenerme a flote de la ansiedad.

Luis Ricardo Ramos es dibujante, cineasta, guionista y docente universitario. En su historia de vida el dibujo es una constante y un gran aliado terapéutico.

Dibuja todos los días: sobre las fotocopias de su título universitario, boletos del metro, recibos le luz y en sus sketchbooks, mientras espera en el banco o hace cualquier cosa. Y ha sido autodidacta. Regularmente dibuja con bolígrafo y plumón, aunque también usa acuarelas y algunas aplicaciones para dibujo y color digital.

Luis Ricardo dibuja desde que estaba en la secundaria pero sólo había compartido sus dibujos a través de las redes sociales hasta que recientemente recibió una invitación para exponer en Liliput, galería experimental de arte (Diagonal 18 sur 4563, San Manuel, Puebla) y sus dibujos estuvieron expuestos durante algunas semanas por primera vez.

En la exposición titulada Lo Nuevo es lo Olvidado había dibujos a bolígrafo, plumón y el color en digital y acuarela. Además de la exposición de sus cuadernos de dibujo y una guitarra intervenida con plumón que realizó en 2006 para un concurso. De sus libretas, él dice que casi todos sus dibujos están incompletos y suele regresar a ellos de vez en cuando para ver cuál está listo para terminarse y compartirse.

Desde hace algunos años suele dibujar en cualquier superficie con bolígrafo y plumón y después tomarle una fotografía para colorearlo con una aplicación y finalmente compartirla en Facebook e Instagram.

Entre sus dibujos hay piezas violentas y sexuales, pero eso nunca le ha generado problema entre sus seguidores.

–Nadie lee nada, no les importa. Es una imagen y no se lee. Puedo poner lo que sea, no hay censura porque no se enteran. Una vez dibujé a la virgen de Guadalupe, sólo así han sentido una sacudida.

En aquella imagen que menciona dibujó a unos fieles diciendo “Virgencita plis, que se vayan los pobres” y la virgen respondiendo “A mí no me digan, yo soy una pintura”.

–Ahí si se pusieron espesos pero qué bueno, quiere decir que están vivos.

Foto: Cortesía

Foto: Cortesía

El camino del dibujante

Al salir de la preparatoria, Luis Ricardo convenció a su papá para tomarse un tiempo y trabajar en vez de estudiar. Uno de los pretextos fue aprender otro idioma, aunque la verdadera razón fue salir de su casa y huir al menos por un rato de la situación complicada que se vivía en su ambiente familiar. En ese año se fue a Gales, en Reino Unido, como voluntario de enfermería al servicio de la comunidad.

Luis Ricardo regresó a Puebla para estudiar comunicación pero pronto supo del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos y se cambió de carrera. Su gusto por las películas es peculiar, dice que le gustan las muy raras, muy experimentales.

Después de una exhalación amplia y corta, Luis Ricardo dice que en el cine no le ha ido muy bien. Cuenta que durante la escuela sus profesores siempre elegían otros proyectos y la única vez que eligieron un proyecto de él fue porque la votación corrió por parte de los alumnos, un documental sobre la vida del caricaturista Jis, que resultó en un producto inacabado cuando el mismo Jis decidió que no continuaría ayudándolos después de la primera entrevista. ¿Y la razón? Luis Ricardo responde con empatía que Jis también era ansioso.

–Después de varias terapias… psiquiatras… fármacos… y otros doctores… -dice Luis Ricardo sobre sí mismo– conocí a un doctor que te aplica una técnica en la que olvidas tu trauma como quien cruza un río. Entonces de repente crucé el río de los traumas de mis fracasos con mis guiones y empecé a escribir un guioncillo y a completar otros proyectos. De eso hace unos 2 meses.

Esa buena racha coincidió con la invitación para exponer en galería Liliput y fue por eso que aceptó de inmediato. Y recalca que mientras dejó de escribir para el cine, nunca dejó de dibujar.

Actualmente escribe un guión por petición y en colaboración con Gabriel Rodriguez Liceaga, escritor poblano, y planean que se convierta en un largometraje.

Acción Mutante Foto: Cortesía

Acción Mutante
Foto: Cortesía

Acción mutante

Para la clausura de Lo Nuevo es Olvidado, en Liliput se llevó a cabo Acción Mutante, una especie de performance o intervención con la obra de Luis Ricardo y el trabajo musical experimental del músico y compositor Iván Macuil.

Una cámara web digital registraba la imagen sobre un pequeño pizarrón blanco donde Luis Ricardo dibujaba y la imagen era proyectada sobre la pared de la galería. Mientras los trazos y la mano del dibujante se movían, podía verse parte del trabajo de Macuil: unos recuadros rojos sobre los trazos de Luis Ricardo. Y a la par, en un ritmo extraño se reproducían sonidos que resultaban ser la traducción musical de los dibujos sobre el pizarrón.

Para esa intervención, Iván utilizó una mezcla de varias técnicas usando de 2 a 4 software. La cámara web envía imágenes y un programa analiza la imagen y detecta blobs, es decir, elementos de contrastes que se traducen en algoritmos. Ese nuevo mensaje se envía a través de un módem a otra computadora, que es la que hace la música con los algoritmos que recibe.

Iván conoció algunas de las posibilidades tecnológicas de la música mientras aún estudiaba y cuando agotó esas herramientas buscó otras, involucrándose en la creación de códigos y el software libre. Ya lleva 10 años aprendiendo estas herramientas y cree que es el futuro del arte y la música.

Acción Mutante fue la primera vez que Iván experimentó con esa nueva técnica en vivo y en la compañía de un dibujante. Además de Luis Ricardo, el artista estadounidense Asher Cohen también colaboró con su voz en la intervención.

Para Luis Ricardo, expresó en su blog personal, fue la cereza del pastel para su escapada del mundo digital con sus dibujos.

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Autor Lado B
Ámbar Barrera
Periodista, comunicóloga, fotógrafa, feminista y amante del arte.
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