Lado B
Desvelada una de las incógnitas del párkinson
Un nuevo estudio analiza cómo las neuronas más vulnerables al párkinson consumen cantidades inusualmente altas de energía
Por Lado B @ladobemx
27 de agosto, 2015
Comparte

Un nuevo estudio analiza cómo las neuronas más vulnerables al párkinson consumen cantidades inusualmente altas de energía. Esta enfermedad neurodegenerativa afecta al 2% de las personas mayores de 65 años, unos 150.000 pacientes en España.

Desvelada-una-de-las-incognitas-del-parkinson_image_380

Agencia SINC

@agencia_sinc

Investigadores de la Universidad de Montreal (Canadá) han descubierto que las células cerebrales con mayor riesgo de desarrollar párkinson consumen cantidades inusualmente altas de energía para funcionar, agotándose gradualmente y muriendo de forma prematura.

«Uno de los obstáculos es que sabemos muy poco sobre qué tipo de células cerebrales –como las de la sustancia negra, una zona heterogénea del mesencéfalo– son más vulnerables”, explica a Sinc Louis-Éric Trudeau, profesor de la institución canadiense y uno de los autores del estudio.

Los resultados, publicados en Current Biology, apuntan que las neuronas ‘sensibles’ son morfológicamente muy complejas, con una extensa ramificación de los axones –prolongaciones de las neuronas especializadas en conducir el impulso nervioso desde el cuerpo celular hacia otra célula–.

“Este tipo de células tan complejas probablemente necesita una gran cantidad de energía para garantizar el correcto funcionamiento de su extensa arborización axonal y la liberación de neurotransmisores complejos. Esto explicaría el deterioro celular acelerado», añade Trudeau.

«Para usar la analogía de un motor –continúa el experto– un coche que se recalienta quemará significativamente más combustible y, como es lógico, terminará en el garaje más a menudo».

[quote_right]Las neuronas ‘sensibles’ son morfológicamente muy complejas, con una extensa ramificación de los axones[/quote_right]

El problema del gasto energético

En este trabajo se muestra que las neuronas de la sustancia negra (que liberan dopamina) parecen producir constantemente energía en niveles muy cercanos a su máxima capacidad a través del funcionamiento de las mitocondrias de los axones.

El experto apunta que el estar constantemente cerca de su límite de producción de energía puede ser una de las razones por las que estas neuronas son tan vulnerables; ya que cuando las mitocondrias funcionan a niveles tan altos producen especies reactivas de oxígeno que pueden convertirse en tóxicas para las células a largo plazo.

“Esto se llama el estrés oxidativo y puede representar una vía final común para desencadenar el párkinson”, apunta Trudeau. Estos hallazgos podrían abrir la puerta a la creación de mejores modelos animales de la enfermedad y la identificación de nuevas estrategias de tratamiento.

[quote_box_left]Extracto de la nota originalmente publicada en Agencia SINC. Click aquí para seguir leyendo.[/quote_box_left]

 

 

Comparte
Autor Lado B
Lado B
Información, noticias, investigación y profundidad, acá no somos columnistas, somos periodistas. Contamos la otra parte de la historia. Contáctanos : info@ladobe.com.mx
Suscripcion