Foto: Agencia Enfoque, tomada de e-consulta.com

Aranzazú Ayala Martínez

@aranhera

El 10 de abril el abogado Luis Soriano estaba en el domicilio de su mamá y tocaron el timbre. Llegó una persona de la Secretaría de Finanzas, se presentó. Llegó a cobrarle una deuda, muy amable, no pasó nada. A los cinco minutos llegó personal supuestamente de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), y al irse sus vecinos le avisaron que había un operativo en la colonia Anzures, donde estaba el abogado defensor de casi 60 trabajadores del gobierno de Puebla, despedidos injustificadamente. Desde donde se ocultó dentro de casa de su madre, escuchó que las personas que lo buscaban hablaban de que “se lo iba a cargar la chingada”.

El abogado salió de la ciudad y tras cuatro meses finalmente regresó, respaldado por organizaciones de derechos humanos.

Antes del 10 de abril ya había recibido amenazas: llamadas, mensajes y correos. La fecha de su partida no fue casualidad: el 17 de abril, una semana más tarde se vencía el plazo para interponer las demandas por los cientos de despidos injustificados de trabajadores de varias dependencias. Directamente Soriano trabajó con 50 casos, de los cuales ha seguido al tanto, y ahora tiene a su cargo otros más. Aunque todavía no hace “corte de caja”, dijo que en estos días actualizará el estatus de las demandas que fueron interpuestas de manera individual por varios despachos de abogados, para ver si ya es momento de interponer amparos por la omisión de las autoridades al no dar soluciones.

En rueda de prensa, en la que lo acompañaron otros activistas como Pame Tajonar, Bernardo Hinojosa y Alberto Merlo, además de otros miembros del Consejo Nacional Ciudadano capítulo Puebla, Soriano habló de la importancia de la unión entre prensa y defensores. Agradeció públicamente a los reporteros que acudieron a su llamado el 10 de abril porque sin el apoyo y difusión de los medios, dijo, quién sabe dónde estaría en ese momento. “Pero aquí seguro no”.

El abogado es el único poblano de quien públicamente se sabe que es parte del Mecanismo de Protección para Defensores de Derechos Humanos y Periodistas, al cual ingresó después de exiliarse de Puebla cuatro meses.

[pull_quote_right]Puebla es un estado más donde pasan violaciones a las garantías individuales. Parece que son más criminales quienes los defienden (los Derechos Humanos) que quienes los violentan[/pull_quote_right]

Explicó que su ingreso ocurrió de manera extraordinaria cuando analizaron su caso tomando en cuenta el contexto del estado. Sin embargo, enfatizó que ya no se puede pensar de manera local, pues la situación de represión contra defensores y periodistas es igual en todo México. “Puebla es un estado más donde pasan violaciones a las garantías individuales. Parece que son más criminales quienes los defienden (los Derechos Humanos) que quienes los violentan”.

Soriano regresó para seguir defendiendo principalmente los derechos laborales, y aclaró que su trabajo “no es un tema de política, es de derechos humanos”. Agregó en la entidad gobernada por Rafael Moreno Valle lo que ocurre es un crimen de Estado, contrastándolo con otros estados donde los ataques vienen del crimen organizado. Aquí es el gobierno quien persigue.

El Mecanismo fue creado en 2011, durante el gobierno de Felipe Calderón, como una red de solidaridad y protección de organizaciones de la sociedad civil.

Al finalizar, responsabilizó públicamente a Rafael Moreno Valle y al alcalde de Puebla, Antonio Gali Fayad, de cualquier cosa que le suceda. Los nombres del gobernador y del edil están también como responsables en los documentos oficiales del Mecanismo, que da protección y seguimiento a todo lo que pase con el abogado.

Además de su trabajo legal de acompañamiento y asesoría de los trabajadores despedidos injustificadamente, Soriano, desde el Consejo Nacional Ciudadano, fue uno de los principales impulsores del juicio ciudadano a Moreno Valle, al que éste no se presentó.

Misraim Hernández, politólogo y activista del Contingente Puebla, reiteró la importancia de la vinculación entre reporteros y activistas: “a nosotros nos salva la vida el trabajo de ustedes”. También hizo una invitación a la movilización que se hará el miércoles 5 de agosto de 2015 a las siete de la noche afuera de la Catedral de Puebla, con motivo de exigir justicia por el asesinato del fotoperiodista Rubén Espinosa, la activista Nadia Vera, la estudiante Yesenia Quiroz, así como de Simone y Alejandra, las otras dos mujeres que estaban en el departamento de la colonia Narvarte.