Lado B
A Girl Walk Home Alone At Night, lo último bueno de vampiros
Por Héctor Jesús Cristino Lucas @
27 de agosto, 2015
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Héctor Jesus Cristino Lucas

[dropcap]M[/dropcap]ás allá de las famosas adaptaciones de “Twiling” o de las fatídicas y previsibles visiones de Tim Burton que nos ha traído actualmente “Dark Shadows”, debo decir que en lo underground, en lo subterráneo, donde casi nadie mira ni escucha, yacen películas que pese a la inexplicable fama de sus contemporáneas más conocidas llevan consigo el legado irrompible de la verdadera bestia chupasangre. De la herencia de Stoker y Murnau que aún siguen aterrorizando a la audiencia como en aquellos tiempos. No es de extrañarse entonces que dentro de tanta basura hallemos excepciones que valen la pena.

Si tuviésemos que recomendar cuatro películas de vampiros del 2010 en adelante que valieran la pena tendríamos que mencionar el regreso de Neil Jordan al cine de vampiros con “Byzantium”, en el 2012. La elegante y sofisticada historia de amor de Jim Jarmusch “Only Lovers Left Alive” en el 2013. La comedia negra neozelandesa dirigida por Jemaine Clement y Taika Waititi “What We Do in the Shadows”, en el 2014. Y, por supuesto, lo último de vampiros que ha llegado en el 2015: “A girl walk home alone at night” de la directora iraní Ana Lily Amirpour, quien como Gigi Saúl Guerrero o como the sisters Soska pudiera considerársele parte de las nuevas maestras del horror.

Y no es para menos, el debut de la iraní ha sido elogiado desde su estreno en el Festival de Cine de Sundance del 2014. Tratamos pues, y según la crítica, como la primer “Spaguetti Western de vampiros Iraní”. Una película de vampiros que reúne las principales características de estas criaturas dentro de su malsana cosmogonía, pero enfocada esta vez en un ficticio Irán. Además de un desgastante halo de romance trillado, pero advierto desde ahora: no decae ni se vuelve previsible porque sabe sorprender. Y que pese a tener innumerables clichés, lo importante aquí es la perspectiva, el trasfondo y su crítica social que la vuelven fresca.

Lo que sí hay que tener en cuenta es que “A girl walk home alone at night” es un ejercicio fascinante de percepción. Amirpour intenta trasportarnos a una ciudad inexistente de Irán. Un micro mundo que pese a ser sacada de su propia imaginación, refleja desde el nombre, Bad City, los problemas sociales y políticos de su país. Sabemos de antemano que el expresionismo alemán sirvió como sátira y alegoría hacia una época de decadencia, llena de conflictos y problemas sociopolíticos. Pues bien, justo eso es lo que esta película demuestra cada minuto. Una ciudad falsa, cuna de mafiosos, llena de corrupción, prostitutas y proxenetas… para contar un cuento de terror.

De igual manera se nota influencia del expresionismo alemán por el uso de blanco y negro dentro de la película. El claroscuro de películas como “Nosferatu” o “El Gabinete del Dr. Caligari”, al mismo tiempo de la representación del hombre como monstruo, era nada más y nada menos que una alegoría de la tragedia del hombre, de la depresión, de la maldad tanto en cuerpo y en espíritu. Que esta directora haya usado la figura del vampiro para cubrir esta película como un filme de “horror o gore” es una jugada inteligente y magistral, porque al mismo tiempo sumerge tantas aberraciones humanas que la vuelven trágica, obscura, sórdida.

Algunas de las tomas también son muestra clara de una referencia expresionista. La apacible pero tétrica realidad que se entremezclan con ficción. El simple juego de música electro, besos apasionados, bailes sublimes y extraños, que a veces parecieran no tener nada de correlación, como escenas de una brutal realidad con conflictos sociales, como la drogadicción y el narcotráfico, la hacen dura, grotesca y aberrante, no por los vampiros sino por su trasfondo. De ahí mismo que se haya escogido a una mujer para el papel del monstruo ya que también se respira cierto halo de feminismo, puesto que la vampiresa usa Chador, como las mujeres iraníes.

Pero lejos de decir que este personaje representa el antagonista del largometraje, si se le mira con detenimiento, se vuelve una especie de antihéroe, capaz de erradicar toda hierba mala que habita en Bad City. Así es, una criatura insaciable que se alimenta de la maldad de esta degradante ciudad.

[pull_quote_right]Si tuviésemos que recomendar cuatro películas de vampiros del 2010 en adelante que valieran la pena tendríamos que mencionar el regreso de Neil Jordan al cine de vampiros con “Byzantium”, en el 2012. La elegante y sofisticada historia de amor de Jim Jarmusch “Only Lovers Left Alive” en el 2013. La comedia negra neozelandesa dirigida por Jemaine Clement y Taika Waititi “What We Do in the Shadows”, en el 2014.[/pull_quote_right]

Mencionamos anteriormente que dentro del argumento se enreda el amor, pero sin duda no está exenta de referencia y homenaje principalmente a la época del romanticismo. Aclaremos algo, que haya monstruos capaces de enamorase de humanos, no es una concepción nueva ni mucho menos perteneciente a la moda del “Twiling”. Este tópico ya se había manejado desde la literatura clásica, precisamente con Mary Shelley y su temible “Frankenstein” y por supuesto, con Bran Stoker y su famoso “Drácula”. De ahí que muchos de los monstruos clásicos sean llamados trágicos, porque precisamente mueren por amor.

Desde el expresionismo alemán, pasando por supuesto a los seres de la Universal Studios, como “El Hombre Lobo”, “El Fantasma de la Ópera” o “El Hombre Invisible”, entre otros, son reflejos del romanticismo puro, de amor que trasgrede la barrera de la muerte y la superficialidad humana. Por ello “A girl walk home alone at night” se une a la lista de seres trágicos que son capaces de enamorarse en medio de conflictos humanos.

El cine de horror actual, en su gran mayoría vive con la obligación de embellecer a la criatura y volverla estereotípica dentro de los cánones establecidos. Y no sólo me refiero a las adaptaciones de Stephanie Meyer, sino también a otras tantas películas como “I Frankenstein” de Stuart Beattie o “Drácula, la historia jamás contada” de Gary Shore. Y quizás el filme de Amirpour peque también de esto, pero aún así se nota la elegancia, la crítica y de vez en cuando la deformación.

Aunque entendemos que la historia es apacible, pareciera que de veces no quiere avanzar al gore, se detiene ante la violencia, se oculta frente la belleza. Quizás por eso resulte un poco lenta, pero termina siendo horror legendario, casi de la época del romanticismo.

¿Con qué tratamos entonces? Quizás, y sólo quizás, estaríamos tratando con una película que debe considerarse ya de culto, y que aunque es de manifactrua iraní, no hay que confundirse, es plenamente estadounidense. Sin embargo, el trasfondo y el western de vampiros en ese contexto, la hacen distinta, original. Recupera homenajes que van del expresionismo alemán hasta los clásicos monstruos de la Universal Studios. Crítica latente a conflictos sociales y una historia de amor que lejos de ser una cursilada agobiante, resulta la muestra más pura de romance clásico que se haya visto en años… y que difícilmente podamos volver a ver.

Si no la has visto y te encantan estas míticas criaturas de la noche por nada del mundo debes perderte “A girl walk home alone at night”. Lo último bueno de vampiros.

[quote_box_center] Sinopsis:

“Se describe como una historia de amor ambientada en un ficticio pueblo fantasma iraní, hogar de prostitutas, drogadictos, proxenetas y otras almas sórdidas. Allí, un solitario vampiro acecha a sus más desagradables habitantes…”[/quote_box_center]

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Autor Lado B
Héctor Jesús Cristino Lucas
Héctor Jesús Cristino Lucas resulta un individuo poco sofisticado que atreve a llamarse “escritor” de cuentos torcidos y poemas absurdos. Amante de la literatura fantástica y de horror, cuyos maestros imprescindibles siempre han sido para él: Stephen King, Allan Poe, Clive Barker y Lovecraft. Desequilibrado en sus haberes existenciales quien no puede dejar (tras constantes rehabilitaciones) el amor casi parafílico que le tiene al séptimo arte. Alabando principalmente el rocambolesco género del terror en toda su enferma diversidad: gore, zombies, caníbales, vampiros, snuff, slashers y todo lo que falte. A su corta edad ha ido acumulando logros insignificantes como: Primer lugar en el noveno concurso de expresión literaria El joven y la mar, auspiciado por la Secretaría De Marina en el 2009, con su cuento: “Ojos ahogados, las estrellas brillan sobre el mar”. Y autor de los libros: Antología de un loco, tomo I y II publicados el 1° de Julio del 2011 en Acapulco Guerrero. Aún en venta en dicho Estado. Todas sus insanias pueden ser vistas en su sitio web oficial. http://www.lecturaoscura.jimdo.com
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