Lado B
Estados de Alimentación: Una reflexión desde el arte
La muestra permanecerá hasta el 28 de agosto en la galería del Instituto de Arte y Cultura de Puebla (IMACP, 3 norte #3) La entrada es gratuita y el horario de visita es de lunes a viernes de 9am a 6pm
Por Ámbar Barrera @astrobruja_
17 de julio, 2015
Comparte
Foto: Marlene Martínez

Foto: Marlene Martínez

Ámbar Barrera

@Dra_Caos

Observar detalladamente nuestra cocina, podría resultar en una experiencia interesante, reflexiva… y preocupante. ¿Qué tal si miraramos una vitamina del tamaño de una sandía pequeña? Tal vez nos daría curiosidad saber cómo funciona realmente ese líquido encapsulado. ¿Qué tal que todos nuestros artículos en la despensa tuvieran un color gris o negro en los envases? Seguro no nos daría tanta confianza consumirlos.

Estas son las preguntas que la exposición de Jeanette Betancourt, Estados de la Alimentación, quiere que nos planteemos. El arte de Jeanette reflexiona sobre la comida; su producción, venta y consumo desde el punto de vista político, económico y social, todo sustentado en una profunda investigación y la interacción con la sociedad.

Jeanette es originaria de Brooklyn (EU), aunque creció en Puerto Rico y también fue nacionalizada mexicana. Como artista se inició en escultura de manera autodidacta y después se especializó.

Estados de la Alimentación es la segunda fase de un proyecto becado por el FONCA dividido en tres etapas. La primera, que concluyó el año pasado, aborda el tema del agua; este año, aborda el tema de los alimentos y el próximo año, abordará el tema de la tierra.

Cotidianeidad e identidad en el cubo blanco

En la pequeña galería del IMACP, Jeanette ha montado su obra a manera de lo que llaman “cubo blanco” pues exponer ciertas piezas de arte en un espacio a manera de cubo blanco permite que el público focalice la mirada sobre el asunto que trata la exposición, y así observe y reflexione con detenimiento.

Una de las piezas, consiste en una serie de utensilios de cocina que se notan desgastados, quemados, abollados o cuarteados. Puede apreciarse a detalle cada objeto y cada una de sus marcas y particularidades son una historia. Tal vez, si miráramos nuestras propias cacerolas y cuchillos en casa, encontraríamos algunos mensajes sobre lo que comemos y cómo lo comemos.

Justamente, el hecho de colocar esos objetos en el cubo blanco es lo que hace que un objeto cotidiano, que pasamos por alto, ocupe un lugar diferente en nuestra mente, no tanto como de valor artístico sino como de reflexión social y en este caso, alimentaria.

Para conseguir estas piezas únicas, Jeanette se encargó de hacer un mapeo en mercados y realizó un intercambio con los cocineros de cada negocio, dándoles un utensilio igual, pero nuevo. Esa acción se registró en vídeo y también es una pieza de la exposición.

— Hay objetos que me costó negociar mucho, como la espátula del taquero. – Dice Jeanette en rueda de prensa – Me decía: es que yo ya llevo muchos años con mi espátula y ya me acomodé. Yo le daba una nueva y hasta de mejor calidad, realmente. Al final le di la espátula nueva y algo más para que se pudiera desprender, le dije que era importante que participara en esta parte del registro.

Foto: Marlene Martínez

Foto: Marlene Martínez

Entre todos los temas que la exposición abarca se encuentra también el de la identidad desde la cocina. A la artista le preocupa, por ejemplo, que el negocio de la comida regional esté desapareciendo por la aparición cada vez más invasiva de grandes empresas transnacionales de comida rápida, con los que los locales no pueden competir en precio.

Saber qué comes es tu derecho

Otra de sus preocupaciones es sobre el maíz transgénico

— Me da mucha preocupación que el maíz transgénico blanco está llegando a México. El 45 o 50% del maíz que consume México viene de Estados Unidos, sin saberlo estamos comiendo maíz transgénico, y yo creo que tenemos el derecho de saber lo que contiene un producto transgénico, no entiendo porque estas compañías se niegan a dar esos datos. Tenemos 6 estados produciendo maíz transgénico a nivel experimental, la UNAM lo sabe – dice enfatizando este último hecho.

Estados de la Alimentación busca visibilizar y concientizar sobre el problema para que, en el mejor de los casos, la gente le exija a las instituciones respuestas y soluciones.

– En Colombia el gobierno implementó el maíz transgénico, el campesino ya no puede sembrar su propio maíz, es delito –lo dice de nuevo enfatizando con gravedad– Estamos en un punto de inflexión donde si no empezamos a atacar esto al rato vamos a andar igual: México, país de la mayor variedad de maíz en el mundo, ya no van a poder sembrar su propio maíz y ahora sólo puede sembrar el transgénico. Eso es parte de la apuesta de esta exposición, abrir conciencia y participar socialmente.

Otra de las piezas, es una serie de esculturas de distintos tipos de pastillas y cápsulas que representan suplementos alimenticios.

— Esta industria es totalmente indefinida, no tiene tanta regulación, se presta a mucho al abuso. Creo que lo vemos en la televisión con una gran cantidad de productos que promueven virilidad, fortaleza, adelgazamiento y hay gente que se muere por usar estos productos, algunos producen infartos al miocardio. Hay que leer mucho, no digo que todo sea malo, pero hay muchos productos que no advierten de las consecuencias y precauciones que deben tomarse al ingerirse.

Hay una pieza que funciona como una biblioteca. Un estante alberga libros sobre alimentación desde distintas y muy diversas áreas. Otras piezas son esculturas de bronce y aleación de plata que representan envases de alimentos, donde la artista emula los bodegones de naturaleza muerta para darle el valor no nutrimental que puede tener la comida.

Foto: Marlene Martínez

Foto: Marlene Martínez

— El objetivo es dar visibilidad a temas que de pronto se pierden en la cotidianeidad.  Si sale al menos una persona con la intención de indagar un poquito más sobre lo que come yo creo que ya la exposición cumplió. Estamos en una época que esos grandes relatos que nos decían como debían ser las cosas ya no giran, cada individuo debe hacer su tarea de encontrar otras verdades y tomar decisiones.

Para Jeanette, el sentido reflexivo y de retribución social del arte es esencial en su producción.

— Mucha gente me ha dicho, mira ¿por qué no haces cosas que sean simplemente estéticas? Y sí, yo las podría hacer, de hecho en alguna ocasión lo he hecho, pero yo siento que si el arte no lleva de por medio un mensaje, una cosa que estés cuestionando, una cosa que estés tratando de denunciar o de compartir, siento que queda incompleto, el arte tiene una función en gran medida también social.

***

En la próxima etapa de su proyecto, en el que abordará el tema de la tierra, incluirá el tópico de las plantas medicinales en México con piezas inspiradas en ejemplares botánicos. Su intención será reflexionar sobre la paradoja de la lucha de las instituciones por prohibir las plantas medicinales, argumentando que pueden ser peligrosas porque se desconocen del todo sus efectos, cuando por otro lado, no te informan de los ingredientes sumamente dañinos que contienen muchos otros alimentos de consumo diario.

Estados de la Alimentación se inauguró ayer en la Galería del Instituto de Arte y Cultura de Puebla (IMACP, 3 norte #3) y permanecerá hasta el 28 de agosto. La entrada es gratuita y el horario de visita es de lunes a viernes de 9am a 6pm.

Comparte
Autor Lado B
Ámbar Barrera
Periodista, comunicóloga, fotógrafa, feminista y amante del arte.
Suscripcion