Lado B
The Human Centipede 3, un cierre grotesco, para una trilogía grotesca
 
Por Héctor Jesús Cristino Lucas @
08 de junio, 2015
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Héctor Jesús Cristino Lucas

[dropcap]A[/dropcap]llá por el 2009 se estrenó en EU una película que cambiaría la concepción del género de terror como tal. Y no hablamos de cualquier cosa, pues The Human Centipede no sólo volvió locos a los amantes del género, sino que también ocasionó una polémica parecida a lo que Ruggero Deodato causó con su Holocausto Caníbal. Una película, que más allá de ser considerada una obra maestra del género por sus efectos gore y por lo escatólogico del asunto, a pesar de que no tiene escenas abiertamente escatológicas, se volvió memorable precisamente por su poderosa idea, por su poderosa premisa.

Y es que Tom Six, responsable de esta oda de horror, mencionaba en sus ruedas de prensa una y otra vez que el experimento: “Es 100% médicamente cierto”, con lo cual alimentaba el morbo.
Inspirado en los atroces (pero interesantes) experimentos nazis, Six nos mostró en esa primera entrega la posibilidad de unir tres cuerpos, de la boca al ano, hasta formar un solo sistema digestivo. Por lo cual, si el primero comía, procesaría la comida para alimentar al segundo, y así, hasta llegar al pobre individuo que le tocaba ser tercero. Esta idea, que puede no parecer tan compleja, trajo consigo una sin fin de críticas, tanto positivas como negativas, que levantaron su éxito.

La película creó a su alrededor todo un fenómeno cultural. Se decía que no había un filme tan asqueroso como este, aunque sólo era exageración. Y las descargas en megaupload (en aquellos buenos tiempos) comenzaron a repuntar. Además, en South Park, como era de costumbre, hicieron una parodia de esta película en su temporada 15, con el capítulo: “Human Centi-pad ”. Sin olvidar la famosa película porno de Lee Roy Myers The Human Sexipede, que cuando vio el trabajo de Tom Six, se dijo a sí mismo: «Este el concepto perfecto para basar una parodia. Cualquier cosa que ponga caras humanas cerca de los genitales merece un tratamiento pornográfico.»

¿Y qué es lo que debe hacerse después del gran éxito de una película? Exactamente, crear una secuela. Y Six no demoró mucho, porque para el 2011 ya se estaba estrenando The Human Centipede 2: Full Sequence. Y que sinceramente considero la mejor de la trilogía, porque aquí, lo que le faltó a la primera se lo añade a raudales a la segunda. En esta hay más sangre, más escenas escatológicas y una visión políticamente incorrecta que sobrepasa límites. Tanto así que se censuró en diferentes países del mundo, y aún en estos años, continúa vetada. Claro ejemplo de Reino Unido, que se prohibió su estreno en pantalla grande y por supuesto, en venta de DVD.

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Y muchos medios de comunicación comenzaron a atacarla. Por lo que su director expresó el enojo, declarando lo siguiente a la revista Empire: “Gracias BBFC por contar el final del argumento de mi película en su página web. Al parecer he hecho una película de terror honorífica, pero las películas de terror deberían ser horrorosas, ¿no? Mi querida gente, es una jodida película. Todo es ficción. Nada es real. Es arte. Dejen que la gente decida si la quiere ver o no. La gente que no puede soportar mis películas simplemente no las ve. Pero aquellas personas que quieran verlas deberían poder hacerlo en cualquier sitio, incluido el Reino Unido.”

Además de la violencia gráfica se añade otro elemento aún más interesante que vuelven a estas películas, en verdad muy curiosas: La metadiégesis. Una narración dentro de la narración principal o el arte que habla del arte. Razón por la que el protagonista observa la película de The Human Centipede para inspirarse a crear su propio ciempiés humano. Es decir, una película dentro de otra. Y aunque esta premisa para muchos es una crítica a lo que una obra cinematográfica puede hacerle al espectador, al punto de inspirarlo a cometer actos violentos, lo que Tom Six está haciendo, más bien, es criticar al espectador que ingenuamente cree eso.

Y así, con “The Human Centipede III: Final Sequence” estrenada en mayo del 2015, la metadiégesis cierra con broche de oro. Porque ahora, los protagonistas que estelarizan la película, tendrán que inspirarse de la fama de los otros dos filmes anteriores para resolver el conflicto que les aqueja en esta grotesca tercera parte.

Tom Six quiso darle un cierre perfecto a su trilogía que le dio renombre. Y aunque para muchos fans se trató de una gran decepción, debemos aclarar ciertos puntos. Para empezar esta última entrega tenía como objetivo superar a sus dos anteriores, y aunque muchos me lleven la contraria, realmente lo ha logrado. Y es que estamos tratando con una auténtica auto-parodia del propio Six, en donde ya nada importa realmente. ¡Al diablo la coherencia y viva lo políticamente incorrecto! Aquí es como si el director intentara burlarse de fenómeno de replica y parodia que generaron sus asquerosas creaciones y de aquellos que las rechazaron. Como una auténtica bomba de burla descarada.

Ya con el simple hecho de auto-satirizarse, supera por creces lo ocasionado con sus dos primeras películas. Además de la innegable sobreactuación de algunos de estos personajes. Como claro ejemplo el actor Dieter Laser con su irritante carácter. Y es justamente eso a lo que me refiero. Todo en esta película es una exageración impresionante que resulta difícil de creer. Y sí, nuevamente nos enfrentamos con una película de serie B, que de vez en cuando roza con la serie Z, la comedia, la burla, el horror, la sangre y lo escatológico a montones. Una película que pareciera no tener límites, ni quiere ponérselos. Por lo que, a ratos, resulta demasiado tediosa.

No hay que negarlo, The Human Centipede III es insoportable a causa de sus deficientes diálogos, lo sé, pero tampoco la sentenciemos. El cierre resulta favorable, venida de una trilogía diferente, original, que aportó algo nuevo al género con la idea de un humano ciempiés. De los llamados “Boca-culos”. Y que reitero cada que puedo: no es de esas películas para todo el mundo. Cuando salió su primera parte la crítica se veía entre la espada y la pared al no saber qué decir al respecto. Hasta que apareció el “gran” Roger Ebert y se atrevió a confesarlo: “Es una película que no es buena ni mala, simplemente se encuentra en un lugar donde las estrellas no brillan”.

Aclarado todo esto, la infame trilogía queda dentro de las gavetas ocultas de películas prohibidas que, según la crítica, nadie debería ver. Al lado de Saló o los 120 días de Sodoma, Holocausto Caníbal, A Serbian Film, The Last House On The Left, Necromantik o Straw Dogs, etc.

Tenemos también la actuación de nada más y nada menos que la ex estrella porno Bree Olson. La espectacular rubia que no hace más que darle el tono gracioso y hasta ridículo a la película, pero también candente y sensual. Haciéndola más descarada y como pieza fundamental de esto que llamamos “Torture Porn”. Es decir, una película de terror que añade elementos eróticos y/o sexuales. La primera cinta en ser bautizada de esta forma fue la aclamada Hostal de Eli Roth. Pero eso sí, no sería la primera vez que se unen pornstars en películas de este género. En el 2008, por ejemplo, Jenna Jameson lo haría con Zombie Strippers. Y la famosa Sasha Grey, en filmes como Would You Rather? o Smash Cut.

Algo destacable de la película es que su idea trasciende más allá de la pantalla. Osea que la premisa no es tan disparatada si se le piensa con detenimiento. El famoso ciempiés humano puede ser usado como castigo factible para pedófilos, criminales o violadores. Cosa que en esta película se insinúa morbosamente, explicando los beneficios que podrían acarrear al usar esta idea como posible sanción para las penitenciarías de EU. Y sin afán de querer hacer spoilers, se expone también un nuevo método que a nadie se le había ocurrido en estos últimos años. Y es que si estamos familiarizados con la idea de un ciempiés, imagínate lo que sería al hacer una oruga humana.

Se corre el rumor de que quizás Tom Six prepare una cuarta parte, pero esta vez la película incluirá alienígenas en el argumento. ¿Alguien puede captarlo? Repasemos. Si la primera parte fue un film que más allá de lo visceral tenía de fondo una idea novedosa, esto cambió con su secuela, que ante la ausencia de ideas frescas apostó por la violencia extrema. Y ya con la tercera parte, el gore, la burla y lo políticamente incorrecto fue lo que reinó, además de la metadiégesis de la metadiégesis. ¿Qué no depara en una posible cuarta parte? No sé. Quizás unos alienígenas que querrán hacer su propio ciempiés humano luego de ver estas películas en sus naves.

Pero insisto, esto no es más que un rumor. Lo que sí se acaba de confirmar es que este director tiene planeado un nuevo proyecto de nombre The Onania Club, que será según él, más controvertida, más polémica y más asquerosa que su famosa trilogía. ¡Maldita sea, Tom Six! Sea como sea, esta última película cumple, un poco forzada, pero cumple. Gracias al gore a la vieja escuela y a su tan característica forma de usar la mierda como pieza de “arte”. Se amerita, sin lugar a dudas, un cierre grotesco para una trilogía grotesca. Y por lo visto, Six seguirá en el negocio intentando hacernos vomitar de diferentes maneras. ¡Amén por eso!

[quote_box_center]Sinopsis: 

“Bill Boss es el alcaide de una de las mayores prisiones de los Estados Unidos, llena de problemas: cuenta con el mayor número de motines, gastos en costes médicos, un no parar de rotaciones del personal… lo que hace que Boss no logre ganarse el respeto de los reclusos ni el del gobernador del estado. En busca del castigo ideal para sus reclusos, el gobernador le da un ultimátum o perderá su puesto de trabajo. Entonces deberá recurrir a su fiel ayudante, Dwight (Laurence R. Harvey) a quien se le ocurre una brillante y revolucionaria idea que podría cambiar el sistema carcelario americano y ahorrar millones de dólares a los contribuyentes.” [/quote_box_center]

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Héctor Jesús Cristino Lucas
Héctor Jesús Cristino Lucas resulta un individuo poco sofisticado que atreve a llamarse “escritor” de cuentos torcidos y poemas absurdos. Amante de la literatura fantástica y de horror, cuyos maestros imprescindibles siempre han sido para él: Stephen King, Allan Poe, Clive Barker y Lovecraft. Desequilibrado en sus haberes existenciales quien no puede dejar (tras constantes rehabilitaciones) el amor casi parafílico que le tiene al séptimo arte. Alabando principalmente el rocambolesco género del terror en toda su enferma diversidad: gore, zombies, caníbales, vampiros, snuff, slashers y todo lo que falte. A su corta edad ha ido acumulando logros insignificantes como: Primer lugar en el noveno concurso de expresión literaria El joven y la mar, auspiciado por la Secretaría De Marina en el 2009, con su cuento: “Ojos ahogados, las estrellas brillan sobre el mar”. Y autor de los libros: Antología de un loco, tomo I y II publicados el 1° de Julio del 2011 en Acapulco Guerrero. Aún en venta en dicho Estado. Todas sus insanias pueden ser vistas en su sitio web oficial. http://www.lecturaoscura.jimdo.com
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