Lado B
A 200 años de lucha feminista poco se ha avanzado: Gargallo
“Si el querer tener una mejor vida y luchar por nuestros derechos es ser feminista, me asumo como tal”
Por Aranzazú Ayala Martínez @aranhera
06 de marzo, 2015
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Foto: Prensa IberoPuebla

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Aranzazú Ayala Martínez

@aranhera

Desde que el feminismo existe como tal –esto es, con mujeres organizadas en agrupaciones de manera colectiva– hace alrededor de dos siglos, la lucha de las mujeres sigue teniendo las mismas exigencias, el acceso a una vida libre de violencia. En el conversatorio “Feminismos y Descolonialidad”, realizado este jueves 6 de marzo en la Universidad Iberoamericana Puebla, la doctora Francesca Gargallo dijo que el 8 de marzo ha transformado la historia del Siglo XX. La fecha, explicó, fue elegida en un Congreso Socialista de Mujeres entre el 25 y el 27 de agosto de 1910, por más de cien mujeres de 17 distintos países. Entonces esta fecha no le pertenece a nadie, la fecha es de todas las mujeres y 105 años después, muchas de las luchas todavía siguen sin ser resueltas

Lourdes Pérez, investigadora del Observatorio de Género de la Universidad Iberoamericana Puebla, abrió la mesa de diálogo recordando que el 8 de marzo no es una fecha para celebrar, sino para conmemorar, para seguir recordándonos que “como sociedad nos falta mucho” para lograr la equidad. Hay movimientos que aunque no consideramos feministas, llevan en esencia esa idea, dijo, antes de darle la palabra a la estudiante de Filosofía y Letras, Paola Espinosa. La joven universitaria leyó su cuento ganador, “Lo que quedó de Etia”, que es la historia en primera persona de Etia, una mujer víctima de explotación sexual, que olvida su nombre y se convierte en un número.

8deMarzo_5Francesca mencionó varias formas de violencia, principalmente la trata de personas que representa una forma de esclavitud. La riqueza se consigue mediante el trabajo, y la trata de personas explota a las personas para que sigan generando riqueza, por lo que se ha convertido en un negocio aún más lucrativo que el tráfico de drogas. La doctora ítalo-griega retomó el relato de Paola, mencionando que la trata implica “el regreso a la esclavitud después de casi 180 años de que fue abolida en toda América”.

La trata necesita de la violencia para prosperar, y es una de las formas de violencia que más se ha reproducido. Este crimen implica la sistematización de la violación y el empeño a no entender que la sexualidad es un acto que sólo se puede desprender de la libre voluntad de la persona. “La trata pasa por la insignificancia que se le da al derecho a la vida e integridad física de las mujeres”, dijo, explicando que durante la colonización de América la trata de personas pasaba como pasa ahora, raptando personas de las cuales las más fuertes sobrevivían, intercambiándolas y explotándolas. En el continente americano se construyeron nuevos grupos humanos teniendo como base la violación sistemática.

[quote_box_left]La doctora ítalo-griega retomó el relato de Paola, mencionando que la trata implica “el regreso a la esclavitud después de casi 180 años de que fue abolida en toda América”. La trata necesita de la violencia para prosperar, y es una de las formas de violencia que más se ha reproducido.[/quote_box_left]

Pero la trata de personas implica también la explotación laboral: hace más de un siglo la lucha feminista exigía derechos como el seguro social, acceso a la educación y jornadas laborales justas, de ocho horas. Hoy en día hay que volver a pelear para tener esas jornadas; Francesca dijo que por cada persona que tome turnos de 12 horas, otra está perdiendo el trabajo, y si se retomaran las jornadas de ocho horas, 30% de los desempleados tendrían trabajo. 

En el ámbito de la equidad de género Europa no está mucho mejor que América: el partido griego de izquierda radical, Syriza, que subió al poder en enero de 2015, no tiene mujeres en cargos importantes. A 230 años del nacimiento de las organizaciones feministas y 105 años del establecimiento del 8 de marzo como fecha de conmemoración de las luchas de la mujer, dijo Francesca, la mujer sigue siendo el eslabón más débil de la sociedad.

En el conversatorio también estuvieron presentes Rufina Villa Hernández y Adriana Petra Cuamai,  de la organización Maseual Siuamej Mosenyolchincauanij (Mujeres que Trabajan Juntas) de Cuetzalan, en la Sierra Norte de Puebla, quienes relataron su experiencia de empoderamiento y organización comunitaria entre mujeres, nacida desde 1985. Al principio la tarea fue difícil porque hubo resistencia dentro de sus hogares, pero poco a poco sus hijos varones y sus propios esposos fueron tomando los roles que tradicionalmente le correspondían a las mujeres en le región, encargándose de las tareas del hogar. La agrupación empezó vendiendo artesanía textil y después se expandió hasta lograr, hace 15 años, construir el hotel Taselotzin, del cual son socias 55 mujeres. Adriana dijo que todo empezó con un sueño bonito que poco a poco fue creciendo hasta llegar a Taselotzin, que toma su nombre del náhuatl, taselot, que es “el pan de cada día” o «el pan y la sal del diario”. 

Ante la pregunta de si se consideraba feminista, doña Rufina respondió que decían que su organización trabajaba con la equidad de género. “Si el querer tener una mejor vida y luchar por nuestros derechos es ser feminista, me asumo como tal”, dijo, pero recalcó que no está contra los hombres, “porque tenemos hijos, esposos y papá”. Esta es una lucha de todos para reconocer el lugar de las mujeres, empezando desde las propias mujeres. 

Finalmente, Francesca dijo que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) “no nos va a decir lo que debemos hacer. Lo debemos decidir autónomamente por nosotros”, y condenó al feminismo racista de la ONU que asume que saben más las mujeres con una preparación universitaria.

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Autor Lado B
Aranzazú Ayala Martínez
Periodista en constante formación. Reportera de día, raver de noche. Segundo lugar en categoría Crónica. Premio Cuauhtémoc Moctezuma al Periodismo Puebla 2014. Tercer lugar en el concurso “Género y Justicia” de SCJN, ONU Mujeres y Periodistas de a Pie. Octubre 2014. Segundo lugar Premio Rostros de la Discriminación categoría multimedia 2017. Premio Gabo 2019 por “México, el país de las 2 mil fosas”, con Quinto Elemento Lab. Becaria ICFJ programa de entrenamiento digital 2019. Colaboradora de “A dónde van los desaparecidos”
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