Crónica de dos marchas por una misma causa • LADO B

Crónica de dos marchas por una misma causa

Puebla se une a las protestas en demanda de la aparición con vida de los 43 estudiantes de Ayotzinapa; estudiantes exigen cese a la represión

Por Lado B @ladobemx

02 de diciembre, 2014

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Texto: Mely Arellano | Aranzazú Ayala / Foto: Marlene Martínez | Leo Herrera

@melyarel | @aranhera / @Qu3tzal | @porqueleo

Esta vez no fueron miles. A diferencia de otras marchas, la de la mañana de este lunes 1 de diciembre tuvo poca concurrencia: 300 o 400 personas.

Fue convocada por la asamblea universitaria de la BUAP y salieron dos contingentes: uno de CU y otro de Psicología (3 oriente y 2 sur), que se encontraron en el Parque Juárez (Blvd 5 de Mayo y 31 Oriente).

Antes de salir, el grupo de CU leyó un pronunciamiento y pliego petitorio en la sede de Rectoría, en él se demandó:

Presentación con vida de los 43 normalistas desaparecidos
Juicio político y renuncia de Enrique Peña Nieto, de Rafael Moreno Valle y de todos los funcionarios públicos corruptos que defenestren el Estado de Derecho y que conforman una clase política que impide el desarrollo democrático del país
Liberación inmediata de las y los presos políticos en Puebla, entre quienes se encuentran: amas de casa, campesinos, indígenas, mototaxistas, luchadores sociales, estudiantes, activistas y presidentes auxiliares.
Cancelación de órdenes de aprehensión contra ciudadanos que participaron en protestas o movilizaciones sociales
Cese al hostigamiento hacia participantes de protestas y movimientos sociales
Suspensión definitiva del proyecto Parque de las 7 culturas en Cholula
Cancelación definitiva de las obras de gasoducto Morelos
Alto a las propuestas de construcción de proyectos de muerte
Alto a los proyectos de privatización de nuestros recursos naturales, como el agua
Abrogación de reformas estructurales de tintes neoliberales y privatizadores
Resolución y aplicación de justicia de los casos de Chalchihuapan, Cholula, Canoa, y cualquier otro que implique represión por parte del gobierno

El contingente que salió de Psicología pasó por la Facultad de Filosofía y Letras, la preparatoria Emiliano Zapata –que, como nunca, tenía las puertas cerradas- y la prepa Lázaro Cárdenas antes de llegar al bulevar 5 de mayo en sentido sur.

Foto: Marlene Martínez

Foto: Leo Herrera

Las consignas nunca se detuvieron, y lo mismo iban del conteo del 1 al 43 terminando con un retumbador grito de “Justicia”, o la reivindicativa “No fue el narco, fue el Estado”, hasta otras que exigían libertad a los presos políticos, y condenaban la represión en Chalchihuapan.

Algunos iban con el rostro cubierto, tal como se promovió en una campaña previa y anónima en redes sociales: una calavera pintada con sangre que chorrea y debajo la leyenda “Si no me cubro el rostro, el Estado me lo quita”, en clara referencia a lo que le sucedió a Julio César Mondragón, el estudiante de la Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa, a quien le arrancaron la piel y los ojos.

Los jóvenes que cubrían su rostro iban grafiteando una imagen de Enrique Peña Nieto con cuernos y abajo la palabra “Pendejo”. En algún momento uno de ellos intentó obstaculizar el trabajo del fotógrafo Joel Merino, le echaron montón, se hicieron de palabras, pero de a poco la cosa se fue calmando.

Foto: Marlene Martínez

Foto: Leo Herrera

En el Congreso del estado se detuvieron para leer el pronunciamiento dado a conocer horas antes en CU. Ahí repitieron su condena ante las “acciones represoras contra movimientos y expresiones populares” del gobierno de Puebla, que ponen “en riesgo la libertad de expresión y la inclusión social”.

También exigieron que la BUAP deje de responder a “intereses privados”, o que se le use como “trampolín político”. Las y los estudiantes recordaron que “la universidad es del pueblo” y demandaron respetar su autonomía.

Finalmente continuaron la marcha hacia al zócalo, a donde llegaron contando hasta 43 y se sumaron a la protesta de la organización popular 28 de octubre.

Unos 20 minutos después, la manifestación había terminado.

Foto: Leo Herrera

Foto: Marlene Martínez

6 de la tarde, fuente de Zaragoza, lámparas, velas, carteles playera blanca. La convocatoria era así para la caminata silenciosa de este primero de diciembre, de la zona de Los Fuertes hacia al zócalo de Puebla, como una actividad pacífica por los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, la jornada nacional de movilización del 1º de diciembre y por la libertad de los presos políticos. A las seis de la tarde todavía había luz y apenas una decena de personas estaban sentadas, esperando.

Foto: Leo Herrera

Foto: Marlene Martínez

Casi media hora después un centenar de personas caminó, despacio, hasta el Boulevard 5 de mayo, entró al centro histórico por la calle 2 Oriente hasta llegar al zócalo, que rodeó, aún en silencio, como parte de la movilización silenciosa iluminada por las antorchas que sostenían un par de personas, iluminando la oscuridad del 1º de diciembre. Hace justamente dos años empezó el gobierno federal de Enrique Peña Nieto en medio de una jornada nacional de protestas y represión que marcaría el tono del sexenio, hasta ahora.

Foto: Marlene Martínez

Frente al ayuntamiento ya esperaba un pequeño contingente de la CNTE y varias personas que empezaron a corear consignas. Las voces todavía eran suaves, siguiendo con la inercia de la marcha en silencio. En el zócalo se dio el pase de lista con los nombres de los 43 normalistas desaparecidos, seguido por pronunciamientos de la asamblea interuniversitaria de Puebla y un evento cultural musical.