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Josué Cantorán

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Los vecinos de unas 16 colonias del sur de la ciudad de Puebla y estudiantes de al menos cinco escuelas de la misma zona podrán seguir utilizando los campos deportivos que han ocupado ya por varias décadas, y ahora con mayor certeza jurídica, pues el Juzgado Noveno de Distrito, con sede en San Andrés Cholula, concedió el amparo colectivo 580/2014 a su favor.

Los “Campos del Seminario”, como se le conoce a unos terrenos de poco más de 62 mil metros cuadrados, ubicados entre las colonias Patrimonio, Granjas del Sur, Vicente Guerrero y Leobardo Coca, han sido utilizados por los vecinos de esta zona desde la década de los 60 como punto de reunión y para actividades deportivas.

El lote, que tiene varias canchas de futbol y beisbol y algunos juegos infantiles, es visitado entre semana por estudiantes de las escuelas Vicente Guerrero, Centenario 5 de Mayo, Carmen Alam, Héroes de Puebla (primarias) y Jesús Reyes Heroles (telesecundaria), quienes ahí realizan sus actividades de educación física a falta de espacio en sus propias instalaciones.

El amplio predio también es visitado, en especial los fines de semana, por vecinos de todas las colonias circundantes que realizan ahí torneos, entrenamientos, juegos o simplemente van a correr o caminar.

En abril de 2004, el Cabildo poblano declaró que el terreno tenía utilidad pública y serviría para “instalar un campo deportivo, que permita la promoción y el impulso de actividades deportivas en el sur de la Ciudad de Puebla” y en mayo del mismo año se publicó el decreto expropiatorio en el Periódico Oficial del Estado.

Esto significó que, pese a que varios particulares reclamaban la supuesta propiedad del predio, éste pasaría a ser propiedad del municipio y los colonos podrían seguir utilizándolo.

Sin embargo, el último día de su administración, el ex gobernador priista Mario Marín revertió la expropiación y entregó el terreno a los empresarios de apellido Miguel Bojalil, quienes, a decir de los colonos, pretendían fraccionar el terreno para construir casas habitación en el mismo.

Los vecinos, agrupados en la asociación civil “Colonos del Sur, Unidos por el Desarrollo de Puebla” siguieron haciendo uso del terreno e interpusieron un amparo ante la reversión de la expropiación, presentando incluso documentación con la que se hacía constar que las escuelas antes mencionadas realizan ahí sus actividades deportivas.

Si bien el Primer Tribunal Colegiado ya había concedido un amparo preliminar, el 9 de septiembre el Juzgado Noveno de Distrito les notificó que había resuelto a su favor el amparo presentado por la señora Esther Pérez Bazán, en representación de sus vecinos.

Con esto, explicaron los integrantes de la AC el pasado viernes en una rueda de prensa, queda nula la entrega de los 62 mil 350.85 metros cuadrados a la familia Miguel Bojalil.

Aunque no se sabe si los empresarios presentarán algún recurso de revisión o buscarán impugnar la sentencia del amparo, esto borra la incertidumbre sobre el uso que hacen los colonos del predio.

–Mucha gente como yo, de la tercera edad, vamos a caminar –dice Galdino Cerón, presidente de la AC– y los jóvenes igualmente van a correr porque esos campos benefician a muchas colonias del sur, por eso estamos pidiendo a las autoridades resuelvan este problema. Si fueron expropiadas para eso, que se respete la expropiación.

El siguiente paso, explica Maria Elena Jiménez, tesorera de la asociación civil, es buscar el apoyo del gobierno municipal o de la Iniciativa Privada para que en el terreno se construya un polideportivo con instalaciones adecuadas, con ciclopista, pista de trote, canchas de básquet, futbol y beis.