Foto: José Castañares | La Jornada

Ernesto Aroche Aguilar

@earoche

Si en el último año de la administración de Eduardo Rivera se invirtieron tan sólo 18 millones de pesos en obras de saneamiento, drenaje y agua, en los primeros cuatro meses del gobierno de Antonio Gali Fayad no se ha destinado un solo peso, eso se desprende del listado general de obras 2014 que el ayuntamiento pública en su página de transparencia.

Sobre el desinterés gubernamental y la falta de inversión en obras que pudieron ayudar a contener las inundaciones que han afectado a la capital del estado en este periodo de lluvias, el regidor del PRI, Iván Galindo ya había cuestionado hace un par de días.

En priísta sostuvo que “nadie podría culpar al presidente municipal de que llueva, por supuesto, pero de lo que sí podemos responsabilizarlo, es por un lado la falta de planeación, dos la mala calidad de las obras y tres el trabajo en obras como el metrobús que han traído problemas en el alcantarillado y desazolve de los ríos”.

Y fue más allá: “Curiosamente las calles y avenidas que presentan inundaciones son las que acaba de inaugurar el gobernador y el presidente municipal y el gobernador del estado, me refiero al bulevar  5 de mayo, el circuito Juan Pablo Segundo, la 25 y la 31 poniente, no es posible que a dos meses de inauguradas presenten en esa problemática. La conclusión es, los poblanos pagamos muy caro por obras de mala calidad”.

14 mdp a baches… ¿y el desazolve?

Entre marzo y mayo de este año, pues febrero aparece sin gasto alguno, el reporte municipal registra un gasto de 58 millones 98 mil pesos, de estos 14 millones 718 pesos se destinaron al pago de “bacheo con mezcla asfáltica caliente” en diferentes calles de la ciudad, prácticamente uno de cada cuatro pesos erogados se fueron a esa actividad.

El resto se gastó en la remodelación y equipamiento del teatro de la ciudad, la construcción del gimnasio Puebla Sur, y la segunda etapa del complejo multideportivo Puebla, pero de obras que hubieran podido contribuir a evitar o minimizar las inundaciones no hay rastro alguno en los documentos municipales.