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De los 12 millones de indígenas que viven en México únicamente ingresan a la educación superior 1.5 por ciento, de los cuales dos terceras partes (1 por ciento) terminan una licenciatura, dijo el maestro José de Jesús Maldonado García, exdirector del Instituto Superior Intercultural Ayuuk (ISIA), centro educativo para indígenas ubicado en la región mixe de Oaxaca.

Aunque ambos números son todavía muy bajos las instituciones como el ISIA, perteneciente al Sistema Educativo Jesuita -del que también es parte la Universidad Iberoamericana-, ayudan a elevar el nivel académico de los jóvenes indígenas, para que al terminar una carrera contribuyan a desarrollar sus comunidades.

Para tal efecto las autoridades del ISIA tienen entre sus planes futuros propiciar diálogos entre lo académico y lo comunitario a través de sus estudiantes, quienes antes de egresar volverán por periodos de semanas a sus comunidades para platicar con su gente e impulsar desde ese momento procesos productivos, culturales y de comunicación que pueda haber en sus pueblos.

Una vez que concluyan sus carreras los egresados del ISIA, como cualquier profesionista, deberán continuar con su inserción en empleos dignos dentro del mercado laboral, un reto de por sí grande a nivel nacional, pero mayor en una zona como la mixe, una de las más pobres de México, agregó el licenciado César Palacios González, actual director del ISIA.

Ayuuk, centro educativo de convivencia entre culturas

En el Instituto Superior Intercultural Ayuuk se imparten tres licenciaturas: Educación Intercultural; Comunicación para el Desarrollo Social, y Administración y Desarrollo Sustentable, las cuales actualmente estudian 139 alumnos, 72 de ellas mujeres y 67 hombres, oriundos de Oaxaca, Veracruz, Guerrero, Tabasco y Chiapas.

Durante sus clases, los alumnos pertenecientes a once grupos indígenas diferentes, como el ayuuk, huichol, tzotzil y huave, son involucrados en el proceso de educación occidental y reconocimiento de su propia identidad, para de esa manera fortalecer sus tradiciones y lenguas maternas; además de aprender a discernir qué es lo mejor de cada cultura.

El ISIA representa para algunos jóvenes indígenas una alternativa de acceso a una educación superior, donde como en el resto de universidades del Sistema Universitario Jesuita reciben una formación de excelencia académica y humana, por medio de conocimientos y valores que promulgan el sostenimiento de diálogos interculturales fraternos entre indígenas y no indígenas, la lucha por la justicia y el respeto a la mujer, entre otros.