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Lado B

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Habitantes de la comunidad de Cuacuila, en el municipio de Huauchinango, denuncian que pese a una orden del Primer Juzgado de Distrito en la ciudad de Puebla, Gasomex continúa con sus perforaciones las 24 horas del día, con el resguardo de las policías estatal y municipal.

Mediante un comunicado de prensa, los denunciantes afirman que luego del amparo colectivo 06/2014 interpuesto contra la empresa Gasomex, la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), así como del presidente municipal Omar Martínez Amador y del presidente auxiliar Rodolfo Lechuga Ahuacatitla, se otorgó una suspensión provisional de la obra el día 7 de enero del presente contra la construcción de un gasoducto.

“Desde octubre del 2013 –continúa el comunicado-, hemos realizado asambleas comunitarias para rechazar este PROYECTO DE MUERTE. Ya hicimos varios llamados pacíficos a la empresa y clausuras simbólicas de la obra. Ya hemos acudido con los gobiernos responsables. Ya se interpuso el amparo colectivo y se nos otorgó la suspensión del proyecto. Sin embargo, GASOMEX SIGUE PERFORANDO ILEGAL E IMPUNEMENTE dañando nuestro suelo, subsuelo, manantiales, flora y fauna. Además de violentar nuestros derechos como pueblo indígena nahua, principalmente el derecho a la consulta que estipula el artículo 6º del convenio 169 de la OIT.

“De igual forma, denunciamos el acoso y hostigamiento que realizan a nuestra comunidad tanto la policía estatal como  municipal que se han encargado de amedrentar continuamente a campesinos de nuestro pueblo y a proteger a los ecocidas de GASOMEX que arrasan arbitrariamente con todas nuestras riquezas naturales, principalmente nuestros valiosos manantiales. Particularmente, el día 20 de enero, 8 compañeros campesinos que acudieron a trabajar la tierra fueron abordados a su regreso a la comunidad por 4 elementos armados de la policía estatal (entre ellos el oficial Valdemar Valderrábano Cruz, patrulla 139) y tratados de manera despectiva, como delincuentes, con toda la intención de intimidarlos. Mientras que a unos metros las mismas policías estatal y municipal resguardan cínicamente el grave delito ecológico que realiza esta empresa contratista de PEMEX.

“Hacemos un llamado a las autoridades de todos los niveles a que pongan un alto de una vez por todas a este PROYECTO DE MUERTE. Exigimos se nos otorguen medidas cautelares para la seguridad de cada uno de los integrantes de nuestro movimiento. De igual forma, responsabilizamos directamente a la empresa Gasomex y a Biósfera Ambiental, al presidente municipal Omar Martínez Amador  y  al presidente auxiliar José Rodolfo Lechuga Ahuacatitla, no sólo de lo que pueda  pasarle a la integridad de cada uno de los que estamos  defendiendo legítimamente la vida y nuestros derechos como pueblo indígena nahua, sino de los procesos legales que se puedan desatar en nuestra contra, pero además, LOS RESPONSABILIZAMOS POR LOS DAÑOS, ACCIDENTES, EXPLOSIONES Y/O PÉRDIDAS DE VIDAS QUE RESULTEN EN EL CORTO, MEDIANO O LARGO PLAZO POR EL GASODUCTO DE LA MUERTE”.