Por primera vez en dos años, pobladores del municipio de Tetela de Ocampo se reunieron con los representantes de la empresa minera Las Espejeras –filial a la empresa Frisco, propiedad de Carlos Slim Helú – para analizar las posibles afectaciones por las actividades de exploración para la construcción de una mina en la región.
Los representantes de la empresa admitieron la existencia de 32 impactos ambientales potenciales, entre los que destacan el cambio de uso de suelo y la contaminación de aire, sonido y vibraciones.
Ante ello, los habitantes de Tetela de Ocampo manifestaron su rechazo contra la instalación de la mina, principalmente por las afectaciones al abastecimiento de agua potable, de mantos freáticos, disminución de la flora y fauna, así como la contaminación al suelo. “No a la mina, sí a la vida”, fue la consigna que prevaleció durante el encuentro.
Acá una galería de fotos que documenta el hecho y el rechazo.