Lado B
BCU, una biblioteca incluyente en Puebla
 
Por Lado B @ladobemx
04 de marzo, 2013
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  • El Área para ciegos y débiles visuales de la BCU cuenta con libros en formato digital, audiolibros e impresiones en braille, películas de audiodescripción y computadoras parlantes, servicios gratuitos a su disposición
Foto: Cortesía.

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Redacción

Con el fin de apoyar la formación profesional y desarrollo personal de ciegos y débiles visuales, la Biblioteca Central Universitaria (BCU) de la BUAP pone a su disposición, de forma gratuita, una amplia gama de material bibliográfico en tres formatos: digital, audiolibro e impresiones en braille, además dispone de películas con audiodescripción y  modernas computadoras y iPad parlantes.

La BCU traspasa fronteras y con equipo especializado, que la ubican entre las mejores del mundo, a través de su Área para ciegos y débiles visuales atiende la demanda de sus estudiantes, así como de otras instituciones poblanas, el país y el extranjero, sobre todo de Latinoamérica, Estados Unidos y Europa.

A un año de iniciar operaciones, ha recibido más de mil quinientas solicitudes de audiolibros, libros en braille y proporcionado asesoría a estudiantes e instituciones públicas y privadas sobre las nuevas tecnologías que sirven de apoyo para el trabajo o tareas de las personas con discapacidad visual.

Un ciego lee más que el promedio de personas que ven y su formación profesional la encamina hacia la Literatura, la Música, el Derecho y las Ciencias de la Comunicación; su gusto está más enfocado a la cuestión auditiva y oral, sentidos con los que desarrolla aptitudes, habilidades y competencias, afirmó el encargado de esta Área de la BCU, Omar Martínez Morales.

Foto: Cortesía.

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Inclusión

La Biblioteca Central Universitaria es un espacio incluyente, donde personas con alguna discapacidad, pueden encontrar lo que buscan para estudiar de forma independiente, con sus compañeros de clase o simplemente disfrutar de la lectura.

A las rampas y elevadores se han integrado tarjetas de orientación en braille, para que el estudiante ciego sepa dónde está. En los modernos centros de cómputo situados en cada piso se encuentran distribuidas 130 computadoras y 85 iPad parlantes.

 “Cuando el usuario nos lo pide, activamos el lector de pantalla para que puedan saber lo que están escribiendo. Los sistemas operativos Mac y Windows permiten que en el momento en que la persona oprime una tecla, la computadora les informa qué letra, número o signo ortográfico accionaron. Así pueden realizar sus tareas y entregarlas a los maestros que no saben braille”.

Tecnología de punta al servicio de todos

En la BCU, que se encuentra en Ciudad Universitaria, los ciegos y débiles visuales pueden elegir entre más de 40 mil textos y revistas digitales (disponibles también para formato braille y audiolibro) lo que quieren leer; pero también pueden elegir entre la base de datos de libros impresos en tinta, porque la dependencia cuenta con equipo de vanguardia para realizar su transformación.

Con aparatos de tecnología de punta y aplicaciones se transforman libros impresos en tinta a texto digital (que se convierte en el recurso madre), para posteriormente convertirlos en audiolibros, que se entregan en diferentes formatos de acuerdo a las necesidades de los solicitantes.

 “No todos los estudiantes tienen dinero para comprar un audiolibro, una maquina en braille o una computadora con programa especial, por lo que nosotros nos adaptamos a los recursos que cada uno tiene. De esta forma, si los estudiantes traen su USB, ahí se lo grabamos; si tienen un equipo de sonido en casa, les entregamos un disco compacto, de igual forma que si es iPod, iPhone, celular o cualquier otro aparato reproductor de MP3, porque nuestro equipo nos permite hacerlo”, comentó Martínez Morales.

Actualmente la Biblioteca cuenta con más de cien audiolibros y el número se incrementa conforme se presentan las solicitudes. “El estudiante puede venir y darnos el libro impreso en tinta que le interesa o bien el título y nosotros lo buscamos, digitalizamos y convertimos en el formato que nos pida”.

 “Para ello se utilizan los motores de voz estándares que tiene Windows, a la que nosotros le ponemos otros sintetizadores para lograr una buena calidad. Tenemos un listado de cinco voces bastante claras, prácticamente como si fueran humanos”, puntualizo el Licenciado en Relaciones Internacionales.

Hay estudiantes que requieren impresión en braille. El espacio de atención cuenta con una maquina Perkins de tecnología australiana, que hace las funciones de una máquina de escribir eléctrica pero con caracteres en braille; un escáner lector autónomo que lee en voz alta lo que escanea y una moderna impresora braille que permite conocer lo que se imprime.

Traspasando fronteras

Desde que inició su servicio, la Biblioteca Central ha recibido más de mil quinientas solicitudes de libros digitales y audiolibros, y mantiene comunicación con estudiantes y académicos de México y diversas partes del mundo, aprovechando las redes sociales.

 “Empezamos atendiendo la demanda interna de los estudiantes de la BUAP y hoy nos solicitan servicio personas de la ciudad y interior del estado, así como de Monterrey, Sonora, Guanajuato, Veracruz, Tlaxcala, el Distrito Federal, Estado de México y Guadalajara, entre otros lugares. En Latinoamérica y Europa tenemos amigos que se comunican con nosotros por internet, nos piden textos en formatos que son accesibles para ellos y les damos asesoría para que aprovechen mejor sus equipos. Así hemos dado servicio a  personas de Panamá, El Salvador, Colombia, Venezuela, Chile, España y Serbia”.

Omar Martínez, quien es ciego y sobre todo muy curioso, aprendió a utilizar la moderna tecnología que hoy maneja con una gran facilidad, para convertir libros a formato digital, audiolibro o braille y trabaja en la impresión en este idioma de cursos de formación social para empresas que fueron solicitados a la BCU-BUAP por instituciones públicas y privadas de 15 estados de la República.

Con la Secretaría de Educación Pública, en el área de educación especial, la Biblioteca participa en el programa Abriendo Puertas.

Películas de audiodescripción

Un nuevo servicio que cada vez tiene mayor demanda es el de préstamo de películas de audiodescripción y series radiofónicas. Se cuenta con más de 400 títulos que pueden disfrutar los ciegos ya que en las escenas donde hay música, silencios o acción que carece de dialogo, un locutor va describiendo lo que sucede en la historia.

Además hay series radiofónicas que en su momento fueron muy importantes y que describen la acción de una forma extraordinaria, como por ejemplo la de Kalimán, que hoy los jóvenes pueden conocer y los adultos volver a disfrutar.

Martínez Morales invitó a las personas a visitar y aprovechar utilizar los servicios que tiene la Biblioteca Central en su Área para Invidentes, donde los servicios son gratuitos; así como a visitar la página, o bien solicitar informes al 2 29 55 00, extensión 2932.

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