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Lado B

“Hay que salir a la calle para defendernos del golpe de Estado de los mercados, que imponen la agenda a los políticos”, da a conocer la convocatoria al 23-F.

Fue a raíz de 2011 que el poder de los mercados internacionales, así como de la protección que los gobiernos han brindado a los mismos, fue cuestionado por las movilizaciones sociales.

En 2011 la revista estadounidense “Time” consideró que “The Protester” o el “manifestante”, era el personaje del año, debido a que durante ese periodo miles de rostros fueron partícipes de revueltas y manifestaciones en las que el pseudónimo “indignado” cobró gran relevancia.

Uno de los grupos que obtuvo mayor relevancia fueron los Occupy, quienes criticaban el modelo económico que generaba grandes brechas entre la ciudadanía y los gobernantes y empresas transnacionales. La demanda de este grupo era fácil de entender: “un cambio a nivel mundial en la distribución económica”.

“La fecha tiene un simbolismo muy claro. Unos días después del 23-F la gente se manifestó a favor de la democracia. Ahora no estamos ante un golpe de Estado militar sino de los mercados, que marcan la agenda de los políticos, y por eso hay que volver a salir a la calle”, comenta Paco Segura, miembro de la organización Marea Ciudadana que ha convocado protestas en más de 50 ciudades españolas y varias capitales europeas.

Se estima que más de 200 colectivos participarán en la convocatoria que pretende manifestarse “contra de los recortes económicos y la democracia”.

Con información de Periodismo Humano.