• La atención médica estuvo plagada de irregularidades durante el ingreso y estancia de la madre

• “Esta vez me informó que era un varón, a lo cual le dije que como era posible si en la mañana me había dicho que era niña, y dijo: no, es niño”, narró el padre

Joseline Santos Enríquez

@joss_santos

El Hospital General Zona Norte enfrenta una acusación por negligencia. Una pareja teme que su hijo recién nacido haya sido intercambiado, debido a que la atención médica estuvo plagada de irregularidades durante el ingreso y estancia de la madre, por lo que exigen que al menor se le practique un estudio genético.

El viacrucis inició desde el pasado miércoles cuando Araceli Rodríguez García, acompañada de su pareja, Iván Gámez Jiménez, acudió a consulta en el área de Consulta Externa de Ginecología, dónde la doctora que la atendió le informó que en dos días empezaría su trabajo de parto.

Para iniciar el trámite, ambos acudieron al Archivo Clínico para verificar sus datos, mismos que tenían errores en cuanto a la fecha de nacimiento, estado civil, grado de estudio y hasta dirección.

Los traspiés continuaron. El viernes 13 de abril Araceli acudió a urgencias, como le fue indicado, sin embargo, aún no presentaba signos que le indicaran que el alumbramiento estaba próximo, así que  los médicos le pidieron que regresara al día siguiente. Además le informaron que su expediente carecía de la información otorgada por la doctora a la que consultaron días antes.

Hasta el sábado, Araceli presentó dolores de parto. Al llevar a cabo el trámite para su ingreso, la pareja se percató que los datos del carnet nuevamente estaban equivocados, esta vez respecto al número de expediente.

Finalmente dio a luz a las 05:25 horas de este domingo.

En reiteradas ocasiones Iván solicitó informes sobre el estado de salud de sus familiares que no le fueron proporcionados por “exceso de trabajo”, hasta que una trabajadora le proporcionó detalles sobre género, peso, y estado de salud de la recién nacida.

Pasaron más de 12 horas después del parto sin que Iván pudiera tener contacto con Araceli, así que solicitó ayuda de la trabajadora social, quien le aseguró que su pareja e hijo estaban en perfecto estado de salud.

“Esta vez me informó que era un varón, a lo cual le dije que como era posible si en la mañana me había dicho que era niña, y dijo: no, es niño. La información la vio de la misma bitácora de la mañana. Le pedí que me diera nuevamente los datos para corroborar y me respondió: hay señor ya se los dije, es niño”, narró Iván.

Las dudas salieron a flote por la serie de errores e inconsistencias en los datos de la paciente y sobre todo porque meses antes a la madre se le practicó un estudio de ultrasonido dónde presuntamente la imagen muestra un feto de género femenino.

A razón de ello, la pareja exige que se les aplique un estudio de ADN para confirmar el parentesco, sin que hasta el momento el director, José Alberto Denicia Caleco, se haya pronunciado al respecto.