Foto: EEF.

Josué Mota

@motajosue

Un nuevo enfrentamiento entre granaderos de la policía municipal y comerciantes de Analco podría registrarse el próximo sábado debido a que el ayuntamiento y los vendedores han manifestado que no cederán en sus respectivas posiciones. Los tianguistas afirman que no permitirán el retiro de aproximadamente 250 de sus compañeros y están dispuestos a la confrontación, mientras que el secretario de Gobernación de la capital poblana, Pablo Montiel Solana, afirmó que las nuevas medidas se comenzarán aplicar esta semana.

Marta Blanco, una de las dirigentes de los comerciantes, dijo que hasta hace unas semanas había aproximadamente 900 comerciantes pero debido a que el ayuntamiento realizó un reordenamiento sólo quedaron 800 y la autoridad pretende retirar a otros 250, pese a que ya cumplieron con las medidas ordenadas.

Dijo que los comerciantes están dispuestos a enfrentarse con los policías para defender sus puestos de trabajo, y denunció que desde el ayuntamiento se ha consentido la actuación de grupos de choque integrados por personas que no son vendedores, por lo que afirmó: “si hay un enfrentamiento, que lo haya”.

Salvador Arizmendi Pérez, otro de los dirigentes, dijo que durante varios meses han intentado llegar a un solución con los funcionarios del ayuntamiento de Eduardo Rivera Pérez y no lo han conseguido, lo que ha derivado en diversos enfrentamientos.

Dijo que es importante que las autoridades tomen en consideración que el comercio de Analco es un atractivo turístico por lo que se debe respetar a los comerciantes.

Por su parte, Montiel Solana declaró a medios de comunicación que con el reordenamiento los comerciantes deberán acudir personalmente a pagar sus impuestos a la Tesorería, pues ya no se permitirá que sean los líderes quienes cobren las cuotas y acudan a hacer los pagos respectivos.

También anunció que las nuevas medidas con las que se regulan los espacios comerciales comenzarán a aplicarse de inmediato y no cederán a ninguna presión.

Bajo este panorama se prevé que el próximo sábado, cuando los puestos se instalen se registre un nuevo enfrentamiento, en un conflicto que lleva ya varias administraciones municipales sin solucionarse y que tiene como principales afectados a los comerciantes.