Trata y prostitución en La Merced
Tomada de youtube.com

Samantha Páez

@samantras

En cifras oficiales Tlaxcala no figura como uno de los estados donde hay un problema por la trata de personas o lenocinio, esto a pesar de que la ONU asegura que es una de las entidades mexicanas donde “ha sido bien documentada” la trata con fines de explotación sexual, y que la solicitud de la Alerta por Violencia de Género contra las Mujeres (AVGM) se pidió justo por la trata de personas y la violencia sexual.

Sin embargo Puebla, vecino de Tlaxcala, sí encabeza la lista de estados con más averiguaciones previas por trata, con 375 de junio de 2012 a junio de 2015, según la CNDH. Además de que se abrieron 295 investigaciones contra posibles explotadores.

Para el Centro Fray Julián Garcés Derechos Humanos y Desarrollo Local el hecho de que Puebla y Tlaxcala sean parte de una misma metrópoli hace que sus problemas sean compartidos, ejemplo de ello es que las redes de trata tlaxcaltecas enganchan y explotan mujeres en territorio poblano, donde también establecen algunas de sus casas de seguridad actuando aquí o allá impunemente.

Tlaxcala no figura en cifras de trata

En la última actualización del Diagnóstico sobre la Situación de la Trata de Personas en México, que publicó en septiembre de este año, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) menciona que las entidades federativas con mayor número de averiguaciones previas por trata de personas son Puebla, con 375; Chiapas, 315; Ciudad de México, 113; Oaxaca, 118; y empatados Baja California Norte y Estado de México, con 95.

Por su parte la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) en su Diagnóstico cuantitativo sobre la atención de la violencia sexual en México, presentado en marzo de 2016, pidió información a las procuradurías y fiscalías locales sobre las averiguaciones previas vinculadas a delitos sexuales de 2010 a 2015. En el delito de trata el estado con más casos es Puebla, con mil 142, luego siguen Chihuahua y Sinaloa una treintena; Tlaxcala no entregó información.

En cuanto a lenocinio –delito que de acuerdo con el Código Penal Federal se refiere a la persona que se explote, induzca o solicite para que comercie sexualmente con su cuerpo, facilite la prostitución o administre prostíbulos-  Puebla y Baja California figuran como los estados con más averiguaciones previas, con 295 y 257, de manera respectiva.

Por turismo sexual hay sólo una investigación en Baja California, en Sinaloa hay 35 averiguaciones por tráfico de menores y en Jalisco otras 32 por prostitución infantil.

Tlaxcala no repunta en ninguna de las cifras oficiales y nacionales por trata de personas o delitos vinculados. Aunque estadísticas del Centro Fray Julián Garcés indican que de 2011 a mayo de 2016 hubo 200 denuncias por trata de personas, son muy bajas comparadas con las mil 142 que se reportaron en Puebla.

Hay subregistro de denuncias

El mismo Centro Fray Julián Garcés en su informe Trata de mujeres y niñas con fines de explotación sexual en el estado de Tlaxcala: Análisis de la situación actual y la inacción gubernamental, dice que de las 200 denuncias 139, es decir, siete de cada diez, quedaron sólo como actas circunstanciadas y por tanto no se siguió investigando, lo cual desincentiva la denuncia.

Aunado a esta situación hay autoridades municipales vinculadas con la trata de mujeres, “lo que ha generado que en las comunidades las personas no puedan pedir apoyo a las autoridades municipales cuando conocen de casos de trata o lugares de explotación”.

La  Organización de las Naciones Unidas (ONU), en el Diagnóstico Nacional sobre la Situación de Trata de Personas en México, sostiene que a nivel nacional en México sólo el 49% de las denuncias derivan en averiguaciones previas, pero en el caso de Tlaxcala es sólo se investiga el 18%. “No hay ninguna otra entidad federativa que registre una brecha tan significativa en esta materia”.

Luego agrega que “la naturalización de ciertas prácticas socioculturales (como sería el lenocinio) que propician el delito de trata de personas en estados como Tlaxcala también posibilitaría la contribución al subregistro de este fenómeno delictivo”.

Redes operan en Puebla y Tlaxcala

La CNDH detectó redes de tratantes en Puebla y Tlaxcala que llegan a nivel internacional, sobre todo a ciudades como Arizona y Nueva York.

El Centro Fray Julián Garcés indicó en una entrevista vía correo electrónico que las redes tlaxcaltecas operan para el enganche en 17 estados de la República y explotan a sus víctimas en 14 de las entidades, también en Los Angeles, Nueva York, Chicago y Texas en Estados Unidos.

En respuesta a una solicitud de información hecha por el centro de derechos humanos, la Procuraduría General de Justicia de Tlaxcala dijo que las 211 víctimas de trata que se localizaron en el estado son originarias de los municipios de Acuamanala, Xicohtzinco, Quiléhtla, Teolocholco, Tenancingo, Zacatelco, Papalotla y San Pablo del Monte, asimismo se identificaron a víctimas de Puebla, Oaxaca, Veracruz, Guanajuato, Morelos y el Distrito Federal.

Más allá de los estudios, los feminicidios y desapariciones de mujeres vinculan a las dos entidades. A principios de este 2016 fue hallado el cuerpo sin vida de Brenda Tlatelpa Mora, originaria de San Pablo del Monte, Tlaxcala, en un hotel de paso de Tepeaca.

A principios de octubre Karla Mireya García Paredes, joven poblana de 18 años, fue encontrada muerta en un terreno baldío de San Pablo del Monte. La joven fue reportada como desaparecida desde el 23 de septiembre, cuando se dirigió a la colonia Guadalupe Conde –por la Central de Abastos- a cobrar una deuda.

Un caso que destacó el Centro Fray Julián Garcés es la desaparición de Karla Romero Tezmol, de 11 años de edad, originaria de San Pablo del Monte. La menor desapareció el 13 de enero, un mes después de que sus familiares la estuvieron buscando recibieron una llamada telefónica advirtiendo que Karla se encontraba en el Hotel Río, de la ciudad de Puebla, y que sería trasladada a Estados Unidos para su explotación sexual.

Ana Yeli Pérez Garrido, del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), comentó vía telefónica que de manera reciente han investigado la desaparición de mujeres y, en ese contexto, Puebla es un foco rojo y por ello urge que las autoridades “tomen cartas en el asunto”.

Las desapariciones, agregó, no tendrían que verse como hechos aislados, ya que han identificado redes de criminales que operan en la zona centro-sur del país, en concreto en Veracruz, Tlaxcala, Puebla y Estado de México, que podrían estar vinculados a la trata de personas.

De acuerdo con el Diagnóstico Nacional sobre la Situación de Trata de Personas en México, realizado con recursos de la Secretaría de Gobernación y a cargo de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC por sus siglas en inglés), el 41.1 por ciento de las mujeres mexicanas víctimas de trata en el extranjero, especialmente en los Estados Unidos, son originarias de Puebla.

Impunidad total en trata

La problemática de la trata de personas en Puebla y Tlaxcala se agrava cuando se observa el grado de impunidad que existe en el delito.

De acuerdo con datos del Centro Fray Julián Garcés, de 2011 a mayo de 2016 sólo 13 casos de trata derivaron en sentencia condenatoria, esto representa una impunidad de 93.5% si se toman en cuenta las 200 denuncias que se hicieron en ese mismo lapso.

Ante esta situación el centro de derechos humanos señaló que “el gobierno del Estado de Tlaxcala ha establecido una estrategia de simulación frente a la trata, ya que dice estar preocupado, pero en la práctica el problema ha crecido a un mayor número de municipios, hemos pasado de 23 en 2008 a 35 en 2014. Lo anterior se debe a que el gobierno no está cumpliendo con su deber de implementar la Estrategia Estatal contra la Trata ni su plan Sexenal”.

En el caso de Puebla, la CEAV dio a conocer que de los 1142 casos que llegaron a la ahora Fiscalía General de Justicia (FGJ), únicamente 104 se consignaron al Tribunal Superior de Justicia (TSJ), lo cual significa que sólo nueve de cada 100 investigaciones llegaron a los juzgados.

Sobre las sentencias en Puebla, el último dato que se tiene es el de la CNDH que indica que de las 107 averiguaciones previas que se tenían de junio de 2012 a 2014 sólo siete derivaron en sentencias, dando un grado de impunidad de 93.5%, igual que el de Tlaxcala.