Héctor Jesús Cristino Lucas

[dropcap]F[/dropcap]ue en el 2009 cuando el uruguayo Fede Álvarez subió a su cuenta oficial de Youtube el cortometraje Panic Attack!, y las visitas se dispararon llevando el contador a millones en pocas horas. Y contrario a lo que uno pensaría, el proyecto no fue alabado por su guión, sino por los efectos especiales que el propio Álvarez había realizado. Utilizó personas que él conocía, y planos de su propia ciudad, Montevideo, para sobreponer secuencias de naves espaciales y robots gigantes con el fin de recrear la ilusión Sci-fi de una invasión alienígena. El trabajo llamó tanto la atención que muchas productoras de cine se interesaron en él, siendo la Ghost House Pictures -de la franquicia The Grudge– una de las principales.

En el 2013 volvimos a saber de Fede Álvarez, cuando Sam Raimi lo eligió para que dirigiese el remake del clásico ochentero por excelencia, Evil Dead. Y pese a que no recibió una gran aceptación por parte de la crítica, hubo algunos –y entre ellos me incluyo- que jamás perdieron la fe al uruguayo, ya que mostraba un talento para los efectos especiales y movimientos de cámara bastante dignos para postreros y mejores trabajos. Y sí, teníamos razón. Este año, se anunció su más reciente proyecto: Don´t Breathe. Un thriller de horror minimalista pero a leguas claustrofóbico, que ya en sitios como Rotten Tomatoes le han otorgado una calificación de 83%.

Vuelve Jane Levy, quien fue protagonista del remake Evil Dead, y Fede Álvarez no sólo estará detrás de las cámaras sino que también será el guionista. En esta semana se ha hecho público el Red Band y sin duda es una de las opciones que no debemos pasar por alto.

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Otro de los estrenos más esperados viene de la mano de Night Shyamalan, quien alguna vez -ya bastante lejano por supuesto- fue considerado como uno de los grandes en el género fantástico. Incluso, y aunque suene exagerado, hubo críticos que lo consagraron como el segundo Spielberg. Y es que todos recuerdan sus inicios en 1999, con aquella pieza de culto en el género de horror y suspenso The Sixth Sense, que sorprendió a la crítica por la jugarreta literaria creada por Henry James en 1898 con su novela The Turn Of The Screw: el giro de tuerca. Es decir, el famoso método del desenlace inesperado, que para inicios del siglo no fue bastante usado –aunque ya existía la poco conocida The Changeling en 1980- por lo que se ganó a la audiencia.

Ya entrados en el nuevo milenio, volvió junto a Bruce Willis en Unbreakable, una especie de thriller psicológico cuya delgada línea fantástica mezcló la temática de los cómics y los superhéroes. Luego, en el 2002, con su thriller de ciencia ficción Signs hizo que el mundo cayera de sus asientos, gracias a una de las historias de extraterrestres más escalofriantes. Y a partir de aquí, su carrera como cineasta fue en un auténtico declive. La crítica no se tragó el forzado argumento de The Village en el 2004 -aunque yo aún rescato esta película-  y la crítica destrozó sus trabajos postreros, he ahí The Happening, Lady in the Water y las mil veces repudiadas: Airbender y After Earth.

Lo más reciente que tuvimos, fue The Visit en el 2015, donde mezcló terriblemente los cuentos de Hadas -principalmente con la metáfora contemporánea de Hansel y Gretel- pero con el ya desgastado Found Footage en una película francamente predecible y simplista. La crítica dejó de interesarse ya en este director, pero hay algunos -aferrados al The Sixth Sense de los 90s- que aún se preguntan: ¿dónde está el verdadero Shyamalan? Por ello, y una vez más, el director vuelve a intentarlo con su más reciente proyecto: Split; un thriller psicológico que verá su estreno en el siguiente año. ¿Será acaso que el cineasta obtendrá por fin su reivindicación?

Lo único seguro es que se trata de su último intento en el género, y que Anya Taylor-Joy, protagonista de The Witch de Robert Eggers, y James MacAvoy de la grotesca Filth, estarán en el reparto.

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¿Alguien recuerda la clásica película de Ted Kotcheff, Weekend at Bernie’s de 1989? Dos empleados modelo de una compañía de seguros, Richard y Larry, a quienes luego de haber descubierto un fraude en donde trabajan se les recompensa con un día en la lujosa casa de su jefe en la costa de Long Island. Sin embargo las cosas se tuercen cuando éste es asesinado y deben arreglárselas para ocultar el cadáver. De ahí, la comedia se dispara a un punto tan irónico y absurdo que en su tiempo nadie supo comprender. Lo cierto es que Swiss Army Man de los directores Dan Kwan y Daniel Sheinert emula la fórmula, pero con un pequeño detalle: es más grotesca y explícita.

El estreno de Swiss Army Man es uno de los más esperados este año, ya que su paso por el Festival de Sundance la convirtió en una de las películas más polémicas. Incluso, se dijo que varios espectadores abandonaron la sala tras sentirse ofendidos. ¿La razón? Bueno, las palabras sobrarían. Lo único cierto es que este par de cineastas se han vuelto un referente con su opera prima. Y no es nada nuevo, incluso este año The Neon Demon de Nicolas Widing Refn recibió la misma recepción por parte de su audiencia en el Festival de Cannes, uniéndose a lo que cineastas como Lucky Mackee o Takashi Miike consiguieron en su tiempo.

El film, pudiera categorizarse incluso como una comedia dramática, rozando maliciosamente por la horrorífica. Tan sólo verle, su comedia recuerda al hilarante Tucker And Dale Vs Evil de Eli Craig o al exagerado Tusk de Kevin Smith. Un trabajo que desde su tráiler ha cautivado un sinfín de espectadores. Incluso la casa productora A24 -la misma que apoyó el trabajo independiente de Robert Eggers, The Witch– se encargó de la distribución alcanzando un nivel de marketing mayor al que se había pensado. De hecho, la distribuidora en México, Caníbal, sí traerá la película a nuestro país y probablemente sea en octubre de este año.

Paul Dano y Mary Elizabet Winstead, junto al esperado Daniel Radcliffe protagonizan el film. Siendo de ésta, probablemente y según algunos críticos maliciosos que con ellos me uno, una de sus mejores actuaciones.

Bonus extra: 31 de Rob Zombie

En el Festival de Sundance de este año el maestro Rob Zombie volvió a las pantallas con su más reciente película: 31. Desde que fue anunciada oficialmente en el 2014 los fans más arraigados especularon que se trataba de la tercera entrega luego de House of 1000 Corpses y The Devil´s Rejects. Se dijo también de la tan esperada continuación de los remakes de Halloween, pero el metalero no tardó en aclarar que se trataba de una película independiente a todos sus trabajos. 31, por supuesto, se refiere a la fecha oficial en EU de la Noche de Brujas, y la trama gira en torno a un grupo de personas a las que se les obliga a participar en un juego con ese mismo nombre.

Según el propio Zombie, la película fue hecha en gran medida por donaciones que los propios fans le hicieron debido al barullo que causó en el 2014 el primer póster promocional. Y aseguró que la inspiración de esta película viene acerca de una estadística que leyó alguna vez: muchas personas, por razones aún desconocidas, se extravían el 31 de Octubre. Retomó la premisa para la realización del film, sólo que trasladándonos a los años de 1975. Con él vuelve su musa predilecta, Sheri Moon Zombie, y el ya reconocido Malcolm McDowell -Álex líder de los drugos en A Clockwork Orange y el temible protagonista de Calígula– en uno de los regresos más esperados del metalero, ya que The Lords of Salem no cumplió con las expectativas.