Aranzazú Ayala Martínez

@aranhera

El Observatorio de Salarios de la Universidad Iberoamericana Puebla, el único en su tipo en todo el país, presentó su informe anual de la situación del salario y la desigualdad económica en México. El informe fue explicado por los maestros Miguel López López y Miguel Calderón Chelius, quienes detallaron que la metodología se basó en analizar los indicadores de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (Enigh), realizada por el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi).

Y si bien sigue habiendo una desigualdad entre los ingresos a nivel salarial, hay un aspecto muy poco explorado, que es el de la desigualdad entre las ganancias de las grandes empresas y los salarios de los trabajadores.

Los especialistas pusieron ejemplos de grandes empresas que tienen más de mil empleados, cuyas ganancias son de aproximadamente 188 millones de pesos al mes, mientras que los sueldos percibidos por quienes laboran en ellas rondan los 14 mil pesos mensuales.

El trabajo técnico que se hizo para llegar a las conclusiones fue el ajuste de los resultados de la Enigh, que no toma en cuenta los ingresos de las personas más ricas pues existe un subreporte muy alto de sus ganancias.

El maestro Miguel Calderón explicó que las encuestas del Inegi no son capaces de identificar la información de los sectores más ricos. Y al ajustar los resultados de la Enigh, tomando en cuenta algunas características de los trabajadores y propietarios de las empresas, las cifras cambiaron por completo: mientras que las encuestas reportan que 70% de la riqueza se va en salarios y 20% se lo llevan las utilidades, al hacer los ajustes se demostró que las empresas son quienes se llevan 70% de la riqueza y apenas 30% se va en salarios.

[quote_box_right]

Particularmente la situación de Puebla es de las más desiguales: la entidad gobernada por Rafael Moreno Valle ocupa el 2o lugar en desigualdad. Después de ajustar la encuesta, Puebla pasó a tener un GINI (índice de desigualdad) de 0.74 puntos a 0.89

[/quote_box_right]Los resultados indican que de cada cien pesos que se ganan, 32 pesos se van directo al 1% de la población de México, que son las personas más ricos del país de acuerdo a Calderón Chelius.

Aunque existe un problema de desigualdad salarial, hay un problema más profundo de la desigualdad del capital. “No es lo mismo el empresario que tiene 2 empleados y gana apenas poco más que ellos, que las grandes empresas donde las utilidades de los inversionistas se cuentan por millones de pesos al mes”, explicó Calderón Chelius. La desigualdad en el país es mucho mayor entre propietarios de empresas que entre los asalariados; por ejemplo, las ganancias promedio más altas son equivalentes a  2420 veces el salario promedio mínimo más bajo dentro de las empresas.

Aunque se menciona que México no ha crecido económicamente, el Observatorio de la Ibero dijo lo contrario. Las grandes empresas están teniendo utilidades enormes, lo que demuestra que la utilidad del país ha crecido sistemáticamente en este tipo de empresas. Sin embargo, los salarios en estos corporativos se han estancado o han disminuido, y por eso es que se dan estos grandes procesos de acumulación.

Particularmente la situación de Puebla es de las más desiguales: la entidad gobernada por Rafael Moreno Valle ocupa el 2o lugar en desigualdad. Después de ajustar la encuesta, Puebla pasó a tener un GINI (índice de desigualdad) de 0.74 puntos a 0.89 (mientras más se acerque al 1 más desigual es la situación económica). Y la tendencia que ha mostrado el estado, donde cada vez hay más personas que ganan menos de dos salarios mínimos, explicó Calderón Chelius, es la misma a nivel nacional.

En concreto, situaciones como la llegada de la armadora alemana Audi no son una solución inmediata, porque existen estas condicionantes de la desigualdad entre salarios y ganancias. “No estamos viendo cómo desde la política estatal se logran reducir las desigualdades”, dijo Calderón Chelius.