(Tercera de cuatro partes)
De acuerdo al último censo poblacional del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), realizado en el año 2010, en la ciudad de Puebla hay al menos 24 mil 327 personas con discapacidad motriz. Que una persona tenga discapacidad motriz, quiere decir que debido a limitaciones parciales o totales en su movilidad corporal, requiere de apoyos técnicos para desarrollar sus actividades diarias.
En entregas anteriores, Lado B se ha dado a la tarea de visibilizar la falta de adecuaciones en la infraestructura de la ciudad para que sea realmente “accesible”. Esta entrega no es la excepción, como requerimientos mínimos, básicos, el Manual Técnico de Accesibilidad para construcciones en el municipio, refiere: pasamanos, un ancho específico para banquetas y andadores (funcional para el paso de sillas de ruedas), y rampas en cruceros y todo tipo de desniveles.
En esta entrega los indicadores no varían: el manual no se cumple y basta con echar un vistazo a un día normal de Esperanza Yazmín Leyva Huerta para saberlo.
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1a parte: Puebla no es accesible para personas con discapacidad visual
2a parte: Puebla no es accesible para personas de talla pequeña
4a parte: El reto de ser independiente en una ciudad que no es accesible