Por incumplir los lineamientos de la Federación los proyectos para construir una alberca olímpica y rescatar la imagen urbana del Paseo Bravo nunca se realizaron
Foto: Marlene Martínez
Shanik David
En 2014 el Presupuesto de Egresos de la Federación contemplaba una partida de gastos para la modernización del Paseo Bravo de 400 millones de pesos, y para la construcción de una alberca olímpica en la capital poblana de 12 millones. Ninguno de esos dos proyectos se llevó a cabo, pues el gobierno de Rafael Moreno Valle no fue capaz de cumplir con los lineamientos que exige la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para liberar dichos recursos.
Y aunque el gobernador del estado aseguró que dichos recursos fueron reorientados para el desarrollo de la glorieta que se construyó sobre el bulevar Atlixco y el bulevar Hermanos Serdán y para la remodelación del Auditorio Siglo XXI, hoy Auditorio Metropolitano, no hay información de la SHCP que confirme las palabras del mandatario, pues la respuesta a “la información solicitada es igual a cero”.
Lo único que se hizo fue pagar 36 millones de pesos al despacho TEN Arquitectos para el desarrollo del proyecto, pero la obra nunca se realizó.
La historia de los fondos que no llegaron
A finales de 2013 las autoridades estatales y municipales hicieron anuncios de obras que, aseguraban, eran para el beneficio de la población: una alberca olímpica y el rescate de la imagen urbana del Paseo Bravo
Las gestiones se hicieron por parte del gobierno de Rafael Moreno Valle y del entonces presidente municipal Eduardo Rivera Pérez para pedir los recursos a la federación, logrando así que ambas obras fueran incluidas en el Presupuesto de Egresos de la Federación para 2014: 12 millones de pesos se etiquetaron para el centro acuático y 400 millones más para el Paseo Bravo.
De hecho la Secretaría de Finanzas adjudicó por vía directo un contrato al despacho Ten Arquitectos (folio SR/ADE016/SI-20131089) que encabeza Enrique Norten por 36.8 millones para la realización del proyecto de obra en Paseo Bravo.
Imagen del proyecto del despacho TEN Arquitectos. Imagen tomada del sitio ten-arquitectos.com
En noviembre del 2014, Rafael Moreno Valle dijo en una entrevista con medios locales que la cancelación del rescate en Paseo Bravo se debió a la falta de permisos del Instituto Nacional de Antropología e Historia y a un retraso en la entrega del proyecto por parte del despacho de arquitectos, pero que los recursos se reorientarían a la remodelación del Auditorio Siglo XXI.
Sin embargo a dos años de distancia ambos proyectos quedaron en el limbo y los 412 millones de pesos nunca llegaron.
La responsabilidad de que dichos recursos, gestionados ante los diputados federales, se perdieran fue de las autoridades municipales y estatales, según reportó la SHCP cuando se le pidieron informes sobre la situación financiera de estas obras.
Como ya se mencionó, estas fueron incluidas en el PEF de 2014 dentro del Ramo 23 “Provisiones Salariales y Económicas” dentro del rubro Proyectos de Desarrollo Regional, quedando registradas con las claves PUE14140100304731 para la “Alberca Olímpica de la Ciudad de Puebla”, la cual tenía como autoridad responsable al Ayuntamiento de Puebla, y la “Recuperación de la Imagen Urbana del Paseo Bravo”, a cargo de la Secretaría de Infraestructura, fue asentada con la clave PUE14140100305697.
Al cierre del año, en los reportes de la SHCP se registraba que no se transfirieron los recursos etiquetados para ambas obras, por lo que se presentaron sendas solicitudes de información para pedir una explicación al respecto.
[quote_box_right]Tanto el proyecto de la alberca como el del rescate del Paseo Bravo no satisficieron lo que marcaban los lineamientos antes mencionados por lo que “no se llevó a cabo el pago correspondiente al Gobierno del Estado de Puebla”, además de que estos recursos se perdieron por completo, ya que no fueron reorientados para algún otro proyecto.[/quote_box_right]
En las solicitudes con folio 0000600289415 y 0000600289515 se pedía, por cada obra, cuál fue el presupuesto que se asignó para la misma y el por qué al cierre del ejercicio fiscal no se habían hecho las transferencias correspondientes; además se pedía saber qué había pasado con el recurso y si éste había sido reorientado para otra obra en el estado.
En ambos casos la respuesta fue la misma: “Para que las entidades federativas puedan disponer de los recursos con cargo a los Proyectos de Desarrollo Regional 2014, es necesario que cumplan con lo establecido en los Lineamientos de Operación de los Proyectos de Desarrollo Regional (Lineamientos), publicados en el Diario Oficial de la Federación el 6 de febrero de 2014, en los cuales se establecen criterios para la aplicación, seguimiento, control, transparencia y rendición de cuentas de dichos recursos”.
Tanto el proyecto de la alberca como el del rescate del Paseo Bravo no satisficieron lo que marcaban los lineamientos antes mencionados por lo que “no se llevó a cabo el pago correspondiente al Gobierno del Estado de Puebla”, además de que estos recursos se perdieron por completo, ya que no fueron reorientados para algún otro proyecto.
Entre los lineamientos que deben cumplir los proyectos para que se puedan proporcionar los recursos del fondo de Proyectos de Desarrollo Regional se encuentran cuestiones básicas como el hecho de que se deben dar reportes trimestrales al gobierno federal sobre el avance de la obra y la aplicación de los recursos.
Además, previo a la ministración del presupuesto se debe abrir una cuenta bancaria productiva exclusiva para estos recursos, de manera que se pueda dar seguimiento y tener un control sobre los mismos.
También se señala que la autoridad estatal debe informar por escrito de cualquier condición o situación que altere la marcha y desarrollo de los proyectos.
Se perdieron 651 millones
Al hacerse una revisión del reporte final de las transferencias de los recursos del fondo de Proyectos de Desarrollo Regional para Puebla en 2014, se encuentran otras obras que sufrieron el mismo destino que el rescate del Paseo Bravo y la alberca olímpica.
Por ejemplo, se había etiquetado un millón de pesos para un miniestadio de beisbol en Chapulco y 100 millones de pesos para el proyecto del Tren Turístico entre Puebla y Cholula, pero ambos proyectos registraron cero pesos al final del año; sin embargo, a diferencia de las otras, estas dos obras fueron incluidas en presupuestos de años siguientes.
Otras obras también se reportaron en ceros, mientras que algunas intervenciones como construcción de andadores o de unidades deportivas en diferentes municipios sólo recibieron una parte del total de los recursos asignados.
En total, Puebla sólo recibió mil 273 millones 584 mil pesos de este fondo en 2014, cuando se habían etiquetado mil 925 millones 18 mil pesos.
Esto significa que se perdieron poco más de 651 millones de pesos, de los cuales 513 fueron por el miniestadio, el tren, la alberca y el Paseo Bravo.
Acá la respuesta de la SHCP en relación al proyecto de remodelación del Paseo Bravo.
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