Tomada de poblanerias.com

Ernesto Aroche Aguilar

@earoche

La llegada de Luis Banck Serrato a la presidencia municipal de Puebla por elección de los legisladores poblanos podrá ser legal, pero no necesariamente legítima coincidieron Eduardo Bohórquez, presidente de Transparencia Mexicana, y Enrique Cárdenas, director del Centro de Estudios Espinosa Yglesias.

Banck Serrato, quien hasta el pasado sábado fungía como secretario de Desarrollo Social en el gobierno de Rafael Moreno Valle, fue designado presidente municipal sustituto luego de la renuncia que presentó Antonio Gali Fayad al cargo para competir en la elección de junio próximo.

Su nombramiento fue otorgado con el aval de 23 de los 41 diputados y el voto en contra de siete. El resto no se presentó a la sesión extraordinaria del pasado sábado en donde el Poder Legislativo lo definió, luego de que Gerardo Maldonado Balvanera -quien fuera el sustituto en la fórmula que ganó la elección- declinara a tomar el cargo argumentando que estaba “imposibilitado material y jurídicamente” para sustituir a Gali, pues en este momento ocupa la subsecretaría del Medio Ambiente en el gobierno estatal. La declinación se hizo a través de un escrito.

En la sesión extraordinaria y a decir del diario La Jornada de Oriente, “el Congreso falló a favor de su designación porque “es un perfil que entiende y da continuidad a un proyecto que las poblanos eligieron en 2013”, expuso Jorge Aguilar Chedraui, presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política”

Por su parte la diputada perredista Socorro Quezada, una de las legisladoras que se opuso a la decisión, dijo que el Congreso le quitó al Cabildo la facultad de elegir a un sustituto para Gali Fayad desde agosto pasado con una reforma a la Ley Orgánica Municipal “a modo”.

[pull_quote_right]Me parece tan grave eso –la imposición de un presidente municipal– como el hecho de que los que sí fueron electos no le rindan cuentas a la gente, me parece tan grave una cosa como la otra, porque ya no es un asunto de legalidad sino de legitimidad[/pull_quote_right]

Con ese antecedente, los académicos cuestionaron la legitimidad de la decisión de los legisladores con la que avalaron la llegada de Banck Serrato para sustituir a Gali Fayad por un periodo de casi tres años.

–En el tema de las elecciones –dijo el ex rector de la UDLAP, Enrique Cárdenas–, y en el tema de los sustitutos sí debería de reformarse la ley. Incluso quienes dejan el cargo después de poco tiempo, a veces en muy poco tiempo, debería ser reglamentado de otra manera, porque no hay ningún costo por hacer las cosas de esta manera.

Eduardo Bohórquez, presidente de Transparencia Mexicana.
Tomada de rendiciondecuentas.org.mx

–La decisión es legal, pues hubo una reforma para que el Congreso tomara esa decisión en sus manos, ¿pero es legítimo? –se le preguntó

–Legítimo en el sentido que fue electo por la gente, pues no, cómo lo va a ser si no pasó por las urnas. La legitimidad y la legalidad en este país puede ser muy distantes, y este puede ser un ejemplo pero hay muchos más. No es que lo haya elegido la gente o no. Cualquiera se puede enfermar, cualquiera se puede morir, y tiene que haber maneras democráticas de sustituir a las personas, pero cuando no es el caso.

Por su parte el presidente de la organización Transparencia Mexicana, Eduardo Bohórquez, coincidió en que fue una decisión que puede carecer de legitimidad:

“Me parece tan grave eso –la imposición de un presidente municipal– como el hecho de que los que sí fueron electos no le rindan cuentas a la gente, me parece tan grave una cosa como la otra, porque ya no es un asunto de legalidad sino de legitimidad. Es legal, pero seguro muchos pensarán que es ilegítimo”.

“Está en la ley, seguirá siendo legal más allá de la autonomía de los ayuntamientos, por eso creo que la discusión no es la legalidad de los actos, sino la legitimidad de las decisiones públicas para ser electos o para otros temas”.