Aranzazú Ayala Martínez

@aranhera

En febrero de 2015 se abrió el nuevo proceso de preinscripciones de la Secretaría de Educación Púbica (SEP) para los alumnos que ingresaron a preescolar, primaria y secundaria.

Antes de acabar el ciclo escolar anterior, docentes, padres y madres de familia se quejaron por la falta de organización y la poca claridad en el proceso. Ahora, a semanas de haber iniciado las clases, la situación en cuanto a cupo y sobrepoblación empeoró en algunas escuelas y el descontento continúa.

Olivia, profesora de la secundaria Filiberto Quiroz de Tepeaca, dijo que en su escuela sí hubo problemas pues el turno matutino se llenó con grupos de más de 40 estudiantes, mientras que en el vespertino no tienen ni 20. A ella y sus compañeros, como docentes del turno de la tarde, les desconcertó que llegaran tan pocos alumnos y que el balance fuera tan desigual. La SEP establece que para que exista un grupo debe haber al menos 20 estudiantes por salón. “Poco a poco han llegado pero no como esperábamos, no como en otros ciclos escolares”.

Generalmente los del turno matutino son del municipio de Tepeaca, pero ahora muchos son de otros lugares como Tecali, y aun así se saturaron los grupos. Olivia dijo que a ella como maestra le preocupa porque teme que ante el pequeño número de estudiantes, desaparezcan el turno y la envíen a otra escuela, quizás más lejos.

En su escuela las mamás y los papás no dicen mucho. La maestra cree que se debe a que son de municipios aledaños o comunidades: “aunque no estén de acuerdo, siempre acatan lo que dicen y ya”.

Sin embargo, en otras escuelas el descontento fue mucho mayor. Por ejemplo, en la primaria Máximo Budib Name, en la ciudad de Puebla, a donde asistía el hijo de Carolina, donde desde el principio no hubo nada claro, sólo rumores sobre el proceso de preinscripción, y nadie les explicó cómo iba a funcionar ni exactamente en qué consistía.  Sabía que en teoría tendrían tres opciones, y los padres y madres de esa escuela estaban conscientes de a qué otras escuelas y en qué zonas reasignarían a sus hijos. Pero ella se enteró apenas quince días antes de concluir el pasado ciclo escolar que su hijo había sido asignado a la Técnica Número 1, en el Barrio de El Alto, por la Cruz Roja, aunque la escuela donde estudió la primaria estaba por Plaza Loreto.

“Es curioso que hay escuelas en las que tuvieron que abrir nuevos grupos de primer grado porque no se daban abasto, y en la escuela de mi hijo, en su salón sólo hay 20 niños”, comentó.

Dijo también que tiene una hija en otra secundaria, en cuyo salón ya no caben los estudiantes. En su caso, la mayoría de los padres y madres de los compañeros de su hijo están inconformes. Algunos tuvieron que inscribirse en escuelas particulares porque a las que fueron asignados les quedaban muy lejos.

Cuestionada sobre la problemática, la persona enlace de comunicación social de la SEP se limitó a reenviar el último comunicado del tema, con fecha del 6 de julio, donde dice que 98 por ciento de los alumnos se asignaron a los planteles de primera y tercera opción. La encargada de comunicación social dijo que sólo había un par de casos que eran atendidos directamente en las CORDES.