Lado B
La nueva batalla de los sawhoyamaxa por su tierra en Paraguay
 
Por Lado B @ladobemx
19 de enero, 2014
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Natalia Ruiz Diaz | IPS Noticias

Asunción. “Che rohenói, eju orendive, aldeia unida, mostra a cara” (Yo te llamo, ven con nosotros, aldea unida, muestra la cara) corearon a mediados de diciembre miles de personas, al comenzar su nueva cruzada para que se cumpla la sentencia de 2006 de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

Foto tomada de www.periodismohumano.org

Foto tomada de www.periodismohumano.org

Durante un festival intercultural en el centro de Asunción se escuchó una y otra vez ese estribillo, en una mezcla de guaraní y portugués, de grupo de hip hop Brô MC’S, de la comunidad indígena brasileña Jaguapirú Bororó, dentro del apoyo internacional a la campaña Todos con Sawhoyamaxa.

Fue el arranque para conseguir las 20.000 firmas de apoyo, que los líderes indígenas se han puesto como meta para presionar al bicameral Congreso legislativo paraguayo a que apruebe el pedido de expropiación de sus tierras, un paso indispensable para que se las restituyan.

“Tras más de 20 años de haber sido expulsados de nuestras tierras ancestrales y vivir al costado de la ruta, viendo cómo las vacas ocupan el lugar donde antes vivíamos nosotros, decidimos volver porque esas tierras son nuestras”, es el mensaje de los sawhomaxa.

Son dos décadas de resistencia que tiene como epicentro el asentamiento comunitario Santa Elisa, al lado de la carretera y a 370 kilómetros al norte de Asunción, en el semiárido Chaco paraguayo, donde viven en condiciones penosas y en supervivencia riesgosa, según la Corte Interamericana.

Los sawhomaxa forman parte de la familia lingüística Exet, una de las cinco en que se agrupan los 19 pueblos originarios que perviven en Paraguay, repartidos en 762 comunidades que se diseminan fundamentalmente por la zona oriental y el Chaco.

Según el censo de 2012 la población originaria suma 116.000 de los 6,4millones de habitantes del país, más de la mitad de ellos del pueblo guaraní.

Con el argumento de que carecían de títulos del territorio donde vivieron siempre, los sawhomaxa fueron expulsados y su tierra ocupada paulatinamente por asentamientos ganaderos.

“Ellos no quieren que progresemos a nuestro modo, queremos las tierras para dedicarnos a nuestras actividades ancestrales como la cacería y la selvicultura”, dijo a IPS el líder de la comunidad, Carlos Cantero.

Se refería al poderoso sector ganadero, que apoyado por sus lobbies han bloqueado hasta ahora que se cumpla la sentencia, teóricamente inapelable, de la Corte Interamericana, un órgano autónomo de la Organización de Estados Americanos.

Lea este reportaje completo aquí.

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