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Lado B

El gobierno iraní detuvo en redadas llevadas a cabo en diferentes oficinas de diarios de este país a 14 periodistas por presuntamente “colaborar con organizaciones mediáticas en lengua persa antirrevolucionarias con sede en otros países”.

Ante este hecho, Amnistía Internacional (AI) hizo un llamado al gobierno de Irán a liberar a los periodistas detenidos, a quienes mantiene recluidos únicamente por desempeñar su labor legítima.

“Este último ejemplo de reclusión de periodistas iraníes es el resultado de las draconianas restricciones a que se ve sometida la labor periodística que violan el derecho a la libertad de expresión y que deben relajarse”, ha manifestado Ann Harrison, directora adjunta del Programa para Oriente Medio y el Norte de África de Amnistía Internacional.

 “Todos los profesionales del periodismo encarcelados en Irán por el mero hecho de desempeñar pacíficamente su trabajo deben quedar en libertad de inmediato y sin condiciones”.

Entre esta detenciones destacan las de Keyvan Mehrgan, quien trabajó para el diario Shargh, y Hossein Taghchi.

Según medios de comunicación iraníes, las fuerzas de seguridad irrumpieron en las oficinas de varias publicaciones con sede en Teherán. Sin embargo, desde el domingo 10 de este mes varios periodistas fueron detenidos en cinco redadas llevadas a cabo simultáneamente, mientras que, según los informes, otros dos fueron detenidos este sábado.

De acuerdo a informes de el organismo internacional, agentes de seguridad registraron y grabaron las instalaciones, así como registraron los domicilios de algunos de los periodistas. A algunos les confiscaron los teléfonos y las acreditaciones de prensa.

Llama la atención que los periodistas detenidos este domingo han sido trasladados a un lugar desconocido hasta el momento, mientras que, según los informes, los dos detenidos el sábado han sido trasladados a la prisión de Evín.