Carlos Manuel Pérez Peña

@ShagGol

La mixteca oaxaqueña es una de las zonas más pobres del país pues en 2010 -según el Consejo Nacional de Población- 61% de los municipios que la integran, presentaba un índice de muy alta y alta marginación. Esta situación repercute en la salud de sus habitantes lo que a su vez obstaculiza el desarrollo económico de la misma; en síntesis: un círculo vicioso.

O por lo menos eso es lo que piensa Isaac Federico Soria Cedillo, doctorando cuya tesis de grado pretende demostrar empíricamente los planteamientos de organismos internacionales sobre la estrecha relación existente entre el desarrollo económico de una región y el estado de salud de la población de la misma, y a la vez cómo este último repercute en la productividad de la gente.

Pobreza y migración

La región mixteca se localiza en la porción noroccidental de Oaxaca, que la comparte  con los estados de Puebla y Guerrero. La mixteca oaxaqueña comprende 155 municipios que se extienden a lo largo de 16,333 kilómetros cuadrados. La marginación que la caracteriza la ha convertido en una de las principales zonas expulsoras de migrantes en México.

En octubre de 2011 el coordinador del Movimiento Agrario Indígena Zapatista (MAIZ) en la región de la mixteca, Omar Esparza Zárate, declaró que la gente en esa zona vive en la miseria ya que el gobierno viola constantemente sus derechos humanos fundamentales, y muchos de sus pobladores se ven obligados a emigrar. De hecho, en 2001, el número de trabajadores mixtecos en la agricultura de California en temporada alta ascendió a unos 50 mil, según Michael Kearney, autor de diversos libros de antropología y  sobre el estado de Oaxaca.

Y lo anterior no sorprende si vemos que unos 94 de los 155 municipios de la zona, están considerados de alta y muy alta marginación. El Consejo Nacional de Población (CONAPO) define a la marginación como las carencias en el acceso a bienes y servicios básicos en tres dimensiones: educación, vivienda e ingresos. (Cortés: 2002)

Ante los altos niveles de marginación se podría pensar que las autoridades estatales y el gobierno federal no destinan parte de sus presupuestos a esta región del país, pero el problema no radica ahí, según Soria Cedillo, sino en “la distribución de esos recursos económicos y la forma en cómo se están invirtiendo”.

El círculo salud-crecimiento económico-salud

En su tesis doctoral intitulada Desarrollo económico de la mixteca como estrategia de apoyo para mejorar el estado de salud de su población vulnerable, el investigador retoma los planteamientos de la Comisión de Macroeconomía de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de que hay una estrecha relación entre el nivel de desarrollo de una región y la salud de los habitantes de la misma.

En el Quinto Coloquio Interdisciplinario de Doctorado, que tuvo lugar recientemente en la UPAEP, el autor presentó un artículo sobre su tesis doctoral. Ahí, señaló que el objetivo de su investigación es impulsar el desarrollo humano en esas localidades paupérrimas de la mixteca oaxaqueña.

Al comentar sus planteamientos, Soria Cedillo, quien tiene un título de licenciado en Ciencias Farmacéuticas por la Universidad de Las Américas Puebla, explicó que las personas que tienen un estado de salud óptimo, producen más y por ello contribuyen al desarrollo económico de su comunidad, mientras que quienes se encuentran enfermos trabajan poco o incluso no lo hacen, lo que les impide colaborar con el crecimiento de su región.

De esta manera, la alta marginación imperante en más de 60% de los municipios de la región, genera un círculo vicioso que obstaculiza el mejoramiento de las condiciones de vida en la misma.

Optimizar los apoyos

A la fecha existen distintos programas de apoyo a las comunidades rurales de la mixteca, tanto públicos como privados, pero desde la óptica del investigador no funcionan por la mala distribución de los recursos.

Al respecto, Isaac Soria, oriundo del Estado de México, argumenta en su trabajo que “las personas y la población más vulnerable de la mixteca no está teniendo acceso a los sistemas de salud, ni tampoco tiene acceso a programas de apoyo”. De esta forma, añade, el estado de salud de la población de la región se va deteriorando, lo que a su vez repercute en el desarrollo económico.

El Instituto para el Desarrollo de la Mixteca A.C. (IDM), una organización no gubernamental fundada por Heladio Ramírez López, implementó en esa región el programa “Mi Meta” que consiste en apoyar a las personas que se acercan a la organización para mejorar su ingreso económico y su calidad de vida. Para lograr lo anterior, el IDM  los capacita para que, en un primero momento, desarrollen cultivos de traspatio. Después de un tiempo y si no abandonan el programa, las personas pueden acceder a recursos económicos de la organización, y también a más capacitación para que pueda tener un cultivo tipo invernadero. Los productos de estos cultivos son vendidos a empresas como WalMart y Kellogg’s.

En el sitio web del IDM se afirma que el objetivo del   proyecto   de   producción   de   alimentos   en   traspatio  es “combatir  la  desnutrición,  demostrando  a  la  comunidad  en la región,  que  se  puede  producir por ellos mismos hasta un 70% de    las   necesidades   de   la   familia   mixteca    en   cuanto   a alimentación”. El programa contempla dar apoyos para que la gente cultive productos  hortícolas, plantas   medicinales   y también para   especies   menores   de   animales  de traspatio  como  conejos,  guajolotes,  pollos  de  engorda, entre otros.

Los beneficiarios de este programa serán evaluados por el doctorando para intentar comprobar su hipótesis de la relación entre economía y salud y viceversa.

La tesis de Soria Cedillo, que defenderá para obtener el  grado de doctor en Desarrollo Económico y Sectorial Estratégico, tiene una metodología que se compone de cuatro etapas: revisión sistemática de la literatura, investigación observacional fase I, investigación observacional fase II, análisis y evaluación de resultados. El proyecto se aplicará en 12 comunidades alrededor de Huajuapan de León, Oaxaca.

En la primera fase observacional el estudioso utiliza la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2006, para conocer los  principales indicadores (número de embarazos, tasa de mortalidad infantil, morbilidad, acceso a los estados de salud, ingresos económicos) para las localidades que forman parte de su estudio. En la segunda fase, lo que busca es establecer una relación de causalidad entre ingreso y salud. Para ello, analizará si las familias que están participando en el programa “Mi Meta”, realmente tienen un ingreso económico mayor a las que no lo hacen y, si es así, verificará si por esta razón esas familias tienen un mejor estado de salud.

Con esta investigación se espera, por un lado, establecer el estado situacional de la región y, por otro, integrar este modelo al programa “Mi Meta” para finalmente evaluar la viabilidad de la implementación de un modelo de asistencia sanitaria.

Hasta este momento, se ha concluido la primera fase del estudio y se está desarrollando la segunda, según informó el investigador. Una vez que se tengan resultados definitivos para la región de Oaxaca, se pretende extender el estudio en las mixtecas guerrerense y poblana.

En el largo plazo, la investigación pretende tener un impacto social consistente en mejorar la calidad de vida de los habitantes de la mixteca, y como consecuencia de lo anterior impulsar el desarrollo económico de esta región tan empobrecida.

De lograrse lo anterior el círculo vicioso se convertiría en uno virtuoso: desarrollo económico-salud- desarrollo económico.

Agóra Científica, un espacio de la escuela de Periodismo de la UPAEP para divulgación de la ciencia y el periodismo científico

Entradas Anteriores

[display-posts category=»agora-cientifica» posts_per_page=»-1″ include_date=»true» order=»ASC» orderby=»date»]