• “Cuidadito y nos denuncias porque ya tenemos tus datos”, amenazaron los uniformados

• Sí se presentó la denuncia; e incluso la mamá de uno de ellos envió sendos oficios a Ardelio Vargas y Rafael Moreno Valle exigiendo justicia

Josué Mota

@motajosue

El pasado 11 de febrero tres policías municipales de San Andrés Cholula asaltaron a tres muchachos que salían de un bar ubicado en la parte posterior de los dormitorios de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), los golpearon, los despojaron de sus teléfonos, de su dinero y, por si fuera poco, los intimidaron para que no denunciaran. Sin embargo, pese a que sí presentaron su denuncia ni las autoridades municipales ni las ministeriales han investigado el asunto.

Los tres muchachos golpeados son Sergio Vélez Mendiola, Christian Villarroel Maceda y Francisco Aguilar Garay. La madre del primero de ellos dijo en entrevista con Lado B que su hijo presentó su denuncia ante el Ministerio Público de San Andrés Cholula al día siguiente de la agresión; posteriormente, ella se encargó de presentar un oficio al secretario de Seguridad Pública del estado, Ardelio Vargas Fosado, quien se comprometió a investigar la situación pero que hasta ahora no ha hecho nada.

De acuerdo con la denuncia de Sergio, cerca de las tres de la mañana salieron del bar y caminaron en dirección al Periférico donde habían dejado estacionado el vehículo en el que viajaban, cuando se acercaban a éste, una camioneta tipo pick up de la Policía Municipal de San Andrés Cholula se detuvo cerca de ellos.

Dos de los policías usaban prendas que cubrían la mayor parte de sus rostros, y uno de ellos les dijo que los iban a detener por estar ebrios y bebiendo en la vía pública. Los muchachos negaron estar ebrios y también estar bebiendo en la calle. Enseguida los subieron a la batea de la camioneta. Uno de los muchachos intentó sacar su celular para hacer una llamada y fue esposado.

En el lugar sólo quedó una jovencita que los acompañaba. La camioneta avanzó sin que los muchachos pudieran ver algo, ya que los llevaban boca abajo en el piso. De pronto el vehículo se detuvo, bajaron a los muchachos y los revisaron; a los tres les quitaron sus teléfonos celulares y sacaron el dinero de sus carteras. Luego le dijeron a Christian que se fuera caminando.

La camioneta avanzó otros 100 metros sobre un terreno baldío y con golpes obligaron a bajar a Sergio y le ordenaron que alcanzara a su amigo, ahí amenazaron: “cuidadito y nos denuncias porque ya tenemos tus datos”. En efecto, durante el cateo que les hicieron tomaron los datos de sus credenciales del IFE.

Oficio enviado a Ardelio Vargas.

Sergio caminó hasta alcanzar a su amigo y junto pidieron ayuda a un conductor que pasaba por la zona, quien los llevó hasta donde estaba su auto y los seguía esperando su amiga. Sergio se comunicó con su familia y entre todos buscaron por la zona aledaña y en la Secretaría de Seguridad Pública de San Andrés Cholula a Francisco, pero no lo localizaron hasta cerca de las siete de la mañana cuando él se contactó con ellos y les dijo que los policías lo habían golpeado y luego lo abandonaron cerca de Plaza San Diego.

Dos de los muchachos ya presentaron sus denuncias, uno más lo hará este fin de semana. La madre de Sergio, Delma Mendiola, entregó un oficio narrando lo ocurrido a Ardelio Vargas Fosado y envió otro al gobernador, Rafael Moreno Valle Rosas, -cuyas copias simples fueron entregada a Lado B– pero no ha obtenido ninguna respuesta. También ha intentado reunirse con el presidente municipal de Andrés Cholula, Miguel Ángel Huepa, para exponerle lo que ocurrió pero no lo ha conseguido.

Oficio enviado a Rafael Moreno Valle.

La señora asegura que la noche en que su hijo fue asaltado, acudió al Complejo de Seguridad Pública de San Andrés Cholula a buscar a Francisco y un policía le dijo que no se preocupara, que sus compañeros a veces hacían eso con los estudiantes pero que más tarde aparecería, lo que la hace pensar que esta ya se ha vuelto una situación común en ese municipio, solapada por sus autoridades.

Sin embargo, la señora asegura que seguirá insistiendo hasta que se haga justicia.