Entre tantas malas noticias, recibimos con alegría quienes la conocemos, la noticia del premio Olof Palme otorgado a la periodista mexicana Lydia Cacho. Recordamos la persecución de que fue objeto por el exgobernador Mario Marín, cuando denunció la red de corrupción de menores en la que estaban implicados los empresarios Jean Succar Kuri, preso, y Kamel Nacif.

El trabajo de Lydia  ha sido de una gran valentía. Fundadora del Centro Integral de Atención a las Mujeres, en Quintana Roo, que desde 2001 está dedicado a la defensa de los derechos humanos, la equidad y tratar de erradicar todas las formas de violencia de género.

Nos da mucho gusto el premio que Lydia Cacho ha recibido, por su labor de todos los días, en contra del abuso hacia las mujeres. Felicidades.

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Santiago Creel, ofreciendo a manos llenas. El precandidato panista a la presidencia de la República prometió a los asistentes a su acto proselitista en Puebla: seguro médico universal, seguro de estudio, de pensión y de desempleo.

Defendió a capa y espada a su exjefe, Vicente Fox Quesada, de lo que llama una infamia, al aludir a la investigación que lleva a cabo la PGR, por enriquecimiento ilícito.

Sostuvo que Fox fue un muy buen presidente y que es este un asunto electoral en contra del expresidente. Seguramente, Santiago Creel no ha visitado el rancho de Fox y no se ha dado cuenta de los lujos que hay en la casa familiar de Vicente Fox y Martha Sahagún.