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Foto e-consulta.com

En 174 mil pesos valuó el Ejército el brazo y la pierna que le arrancó a Osvaldo Zamora Barragán una granada, presuntamente olvidada por elementos castrenses, mientras llevaba sus chivos a pastar en las inmediaciones de Petlancingo, Puebla, pues esa cifra fue lo que ofreció como pago compensatorio.

La información fue dada a conocer por Bernardo Zamora, padre del menor, quien también hizo público que los mandos castrenses rechazaron el pago de una pensión vitalicia al niño debido a que no es hijo de un elemento en activo.

“Dicho por el propio personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en forma déspota, que estoy obligado a firmar (el pago único), puesto que es la indemnización que corresponde a mi hijo, puesto que ya fue un punto de acuerdo de los legisladores, puesto que es civil y que en lo futuro me vaya preparando para conseguirle un trabajo”, sostuvo el padre del menor en rueda de prensa ofrecida en la ciudad de México.

De recibir el pago, añade, deslindaría al Ejército de cualquier responsabilidad sobre los hechos ocurridos mientras el niño cuidaba un rebaño.

El padre también informó que acordó con su esposa y familia “no firmar ningún documento para que no se nos quiera sorprender, puesto que no nos permiten leer ningún documento, ni nos dan copia para asesorarnos puesto que nosotros no sabemos de leyes”.

Indicó que el Hospital Central Militar del Área de Pediatría le informó de manera verbal que el menor perdió sus extremidades derechas brazo y pierna, y que aún se valora el estado físico de su pierna izquierda.

Bernardo Zamora recordó además que el gobierno de Puebla tampoco ha cumplido con la entrega de una vivienda que se les prometió, aunque reconoció que han recibido 6 mil pesos mensuales de apoyo.

“Se nos anunció el apoyo una vivienda por parte del Gobierno del Estado de Puebla, donde hasta la foto se tomaron los funcionarios, y a la fecha no sabemos nada de dicha vivienda ni se nos ha comentado nada, más sin embargo llegan con documentos para que firmemos a lo cual nos hemos negado.

“Aún no se ha integrado una verdadera averiguación previa por parte del Ministerio Público adscrito a la Procuraduría General de la República», enlistó el padre del Oswaldo.

Por último reprochó que el personal de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) se ha acercado con la familia

Cabe recordar que la Sedena reconoció que en la zona del accidente, conocida como El Ídolo, hay una zona de adiestramiento, de práctica de tiro, sin que haya señalamientos que adviertan esta situación.

Con información del diario Reforma