Joseline Santos Enríquez

@joss_santos

Para motivar el saneamiento de la industria automotriz en el mercado mexicano, diputados federales impulsarán una iniciativa de Ley que elimine el Impuesto al Valor Agregado (IVA), el Impuesto Sobre Autos Nuevos (ISAN), que evite el ingreso de autos usados a territorio mexicano, y obligue a implementar la Verificación Vehicular en las 32 entidades federativas.

Los integrantes de la Comisión de la Industria Automotriz de la Cámara de Diputados visitaron la planta armadora Volkswagen dónde se reunieron con directivos de la empresa, quienes les informaron sobre la operatividad y comercialización de los vehículos en México.

En este marco, los legisladores plantearon eliminar IVA e ISAN, medida que con la que disminuiría el costo de un automóvil nuevo, ya que actualmente, estos impuestos aumentan el valor total de las unidades entre un 18 y un 23 por ciento, detalló el presidente de la citada Comisión, Melchor Sánchez de la Fuente.

“Hemos hablado de impuestos que están cobrados indebidamente, porque no es posible que el ISAN esté disperso en la factura de un automóvil, no está desglosado y después sí te cobran el IVA sobre el valor total de la factura y del ISAN, eso no puede ser están encareciendo el automóvil indebidamente entre mil o más de diez mil pesos de este impuesto”.

El legislador precisó que la eliminación de los impuestos no generará otros para compensar los ingresos a las arcas federales, por el contrario, señaló que de disminuir el costo de las unidades, la demanda aumentará, al igual que los empleos.

En el mismo tenor acotó que se pretende evitar el ingreso al país de autos usados, toda vez que la sobreoferta provoca que los vehículos adquiridos en territorio mexicano se devalúen hasta en un 30 por ciento durante los primeros años.

El legislador estimó que el proyecto de iniciativa de Ley será presentado al Pleno para su análisis y posible aprobación en el transcurso de la semana.

Nulo crecimiento de la industria automotriz en México: AMIA

A lo largo de 11 años, la industria automotriz en México se estancó, debido a que las ventas en el mercado interno para este 2011 serán entre 890 mil a 900 mil autos, es decir, la misma cantidad que se comercializaba en el año 2000, indicó el presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), Eduardo Solís.

Según estadísticas de la asociación a principios de este siglo, México vendía diez autos por cada mil habitantes, Brasil nueve y Argentina ocho. Una década después, la industria en Brasil y Argentina –dónde no ingresan autos usados de otros países-  creció casi en un cien por ciento, ya que para este año las ventas serán de 21 y 19 autos por cada mil habitantes, respectivamente. México sigue vendiendo diez autos por cada mil habitantes.

A decir del industrial, el rezago mexicano obedeció a que la implementación del decreto de 2005 que permitía el ingreso de automóviles usados del extranjero fue devastador, pues en el periodo enero-septiembre de 2006 más de seis millones de vehículos chatarra se internaron en el país.

En 2009 se corrigió la política foxista, ya que la entrada de autos usados de procedencia extranjera fue prohibida, pese a ello jueces otorgaron amparos para continuar comercializando las unidades.

Tan sólo en agosto de este año personas que contaban con amparos más de 44 mil 500 autos se importaron.

Este escenario merma la comercialización de autos usados y nuevos, indicó Eduardo Solís, por ello urgió que el Congreso de la Unión realice las modificaciones de ley necesarias para evitar el ingreso de unidades extranjeras al país.

Desde su perspectiva, las estrategias que podrían aminorar el problema de la industria automotriz mexicana son la promoción del mercado (a través de financiamiento para la adquisición de vehículos), incentivos fiscales (eliminación de impuestos), y sanear el parque vehicular con un programa de chatarrización o la implementación de control para la emisión de gases.