• Los tres legisladores perredistas podrían abandonar el grupo parlamentario del PAN

• Antonio Gali, Eric Cotoñeto y Jorge Garcilazo acusaron a Riestra Piña de frenar su trabajo

Joseline Santos Enríquez

@joss_santos

El coordinador de la bancada local del PAN, Mario Riestra Piña, no se mostró preocupado ante la posibilidad de que los tres diputados perredistas se separen del grupo parlamentario albiazul, pues rechazó que los haya marginado de los acuerdos tomados en el Congreso local, como opinaron los legisladores del Sol Azteca.

Hace unas semanas, los diputados panistas dieron a conocer los resultados del trabajo parlamentario del Primer y Segundo Periodo de Sesiones, dónde se evidenció que el PRD sólo impulsó una ley: la de Sociedades de Convivencia.

En respuesta los diputados de dicho partido, Antonio Gali López (coordinador), Eric Cotoñeto Carmona y Jorge Garcilazo Alcantara, acusaron a Riestra Piña de frenar y marginar su trabajo, según reveló el dirigente estatal del PRD, Miguel Ángel de la Rosa Esparza.

Sin embargo el aludido aseguró que el trabajo siempre ha sido de manera coordinada, toda vez que tras los resultados de los comicios de 2010 los legisladores se comprometieron a impulsar lo establecido en la plataforma electoral dejando de lado los intereses partidistas o de grupo.

Asimismo dijo desconocer si sus correligionarios intentaron impulsar leyes, decretos o posicionamientos que les fueran negados, aunque reconoció que en el caso de la Ley de Sociedades de Convivencia la bancada panista les adelantó que no avalarían el tema por contravenir la ideología, principios y valores del partido; aunando a que no estaba considerada en la agenda legislativa ni en los compromisos de campaña.

De este modo, Mario Riestra negó conflictos con los diputados perredistas, pero reconoció que tienen la libertad de intentar recuperar su identidad partidista.

Cabe recordar que al asumir el cargo, los diputados del PRD, Nueva Alianza y Movimiento Ciudadano (antes Convergencia) se sumaron a la bancada panista debido a que la Ley Orgánica del Congreso local no reconoce las coaliciones sino los grupos parlamentarios. La intención era conservar la mayoría en el Congreso con 20 legisladores.

Ahora, tras casi ocho meses de trabajo y con las elecciones del 2012 cada vez más cerca, los perredistas analizan la posibilidad de regresar a sus colores.