Es lamentable que el gobernador Rafael Moreno Valle Rosas anuncie que quienes se opongan a los proyectos de la administración estatal se enfrentarán a él, pero no personalmente, sino que se enfrentarán a él como titular del poder Ejecutivo, y es lamentable porque un enfrentamiento es lo menos deseable, se debería privilegiar el diálogo.

En el caso de la construcción que atravesará la zona de Los Fuertes, los investigadores y expertos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) han dado a conocer su punto de vista y han exhibido argumentos, han realizado manifestaciones pacificas. No se trata de un grupo de delincuentes pretendiendo por la fuerza imponerse, por ello resulta injustificable que la respuesta del mandatario sea que se enfrentarán a él.

También resulta lamentable la falta de firmeza de los directivos del INAH para fijar un postura oficial de forma pública frente un problema que atañe a Puebla y también a la nación ya que, según expertos del INAH, con el proyecto que ya está en marcha se pone en riesgo la Declaración de la Ciudad de Puebla como Patrimonio de la Humanidad.

Si el proyecto perjudica la Zona de Monumentos, los directivos del INAH deben decirlo; sino es así, también deben decirlo porque ese es su trabajo y la Ley Federal de Monumentos y Zonas Arqueológicas los obliga en su calidad de funcionarios públicos. Con ello, quizá no se terminaría la controversia, pero habría un punto de partida para el diálogo y no para el enfrentamiento.