Escoltado por un fuerte dispositivo policial, Anders Behring Breivik, quien confesó haber asesinado a 77 personas en la isla noruega de Utoya, regresó al lugar de los hechos para aportar más información a la investigación de la matanza en el campo juvenil.
Y es que a pesar de la discrecionalidad que existió para que las investigaciones se llevaran a cabo, el diario noruego VG difundió una fotografía de la visita del multihomicida noruego en la que participa junto a las autoridades en la isla de Utoya.
En conferencia de prensa, Pal Fredik Hjort-Kraby, portavoz de la policía noruega, informó de que han podido recabar más datos sobre cómo se llevó a cabo la masacre: «es importante saber lo máximo posible de lo que sucedió en la isla, aunque tenga que contarlo el propio sospechoso», indicó.
Actualmente Breivik permanece encarcelado en la prisión de Ila, al oeste de Oslo.
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